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Periodistas del New York Times podrán utilizar IA de forma legal
Oaxaca, Oax., 14 de agosto del 2011(Quadratín).- En el octavo mes del año de su ejercicio gubernamental, el gobernador Gabino Cué hizo un cambio y dos enroques en su cuerpo administrativo, así, sustituyó a Irma Piñeyro como secretaria General de Gobierno y nombró al contador público Jesús Martínez Álvarez como nuevo responsable del área. También sustituyó al secretario de Desarrollo Social y Humano Carlos Altamirano por Gerardo Albino González quien fungía como coordinador de los Módulos de Desarrollo Sustentable y en ésta área nombró a Benjamín Robles Montoya quien fungía como secretario particular del Gobernador.
En buena hora el gobernador del Estado está entendiendo que él fue elegido por la mayoría de los electores oaxaqueños que participaron en las elecciones del 2010, y en cuanto titular del Poder Ejecutivo es el único responsable de la conducción de la administración pública estatal y de las relaciones que guarda ésta con los gobiernos municipales, con el gobierno Federal a través de sus delegaciones administrativas y con los diversos grupos sociales, productivos, culturales etc.
Si bien llegó al poder político del Estado mediante una coalición de partidos diversos no tendría porque compartir la responsabilidad del ejercicio del gobierno. En los primeros ocho meses de su administración el gobernador Gabino Cué se vio como un prisionero de las diversas fuerzas políticas que lo llevaron al poder, que desde luego, originaron una acción gubernamental que se puede describir a partir de lo siguiente:
1.- Se estaba ya en condiciones de ingobernabilidad que implicaba una fuerte descomposición del gobierno aliancista. Esta tesis se confirma por las palabras de Jesús Martínez Álvarez al tomar posesión como Secretario General de Gobierno, al decir que entiendo que esta administración, como gobierno de transición, tiene el objetivo de restaurar o crear condiciones de estabilidad política. Si se hubiesen dejado las cosas como estaban, con un fuerte conflicto de intereses y que en palabras de la ex-Secretaria General de Gobierno, quien sostuvo que es muy lamentable que quien tenga que definir no lo haga y permanezca rodeado de un coto de poder. El sistema de cuotas que busca beneficiar a los que lo llevaron al poder político y que derivó en un régimen patrimonialista y prebendario estaba ocasionando una fuerte crisis de ejecución administrativa que a la vez estaba derivando en una inestabilidad política. El gobernador, pues, comenzó por hacer los ajustes en los tres personajes claves de su administración y que estaban ocasionando un desbarajuste político y administrativo.
2.- Hay un pleno reconocimiento por parte del gobierno que se estaba ante una administración ineficiente y corrupta, que desde luego, no se estaba respondiendo a las expectativas ciudadanas. Así lo reconoce el comunicado del gobierno al anunciar los cambios, al afirmar que con el propósito de redoblar esfuerzos a favor de la ciudadanía y hacer más eficiente su administración se hacen los primeros ajustes a su cuerpo administrativo. Esto quiere decir que no existía coordinación entre las áreas del propio gobierno, con los municipios y con el gobierno Federal, y aquí que el nuevo Secretario reconociese como un nuevo propósito, trabajar de una manera coordinada para elevar la eficiencia administrativa del gobierno. La incompetencia administrativa de los nuevos funcionarios estaba poniendo en peligro las expectativas y propósitos del nuevo gobierno oaxaqueño. Sin embargo, para lograr una eficiente administración pública se hace necesario ahondar los cambios de estructuras, funciones y crear una administración pública mucho más ágil, pronta, enérgica, responsable y sobre todo eficiente, no se puede lograr a través de sólo mediante cambios de los titulares.
3.- Los funcionarios públicos del gobierno aliancista no estaban asumiendo con un sentido democrático sus responsabilidades, más bien tenían una actitud autoritaria y despótica hacia sus gobernados. Por eso el nuevo Secretario General de Gobierno llama a una mayor apertura para la construcción de los acuerdos, mayor compromiso para solucionar los conflictos, la necesidad de que los secretarios y directores generales estén dispuestos, a la más elemental actitud que debe tener un servidor público, que es la de escuchar, trabajar y buscar soluciones para los ciudadanos. Para ocultar sus ineficiencias e irresponsabilidades los miembros del gabinete ampliado se justificaban echándole la culpa de todo los males de Oaxaca al gobierno anterior, de aquí que es buena la petición del nuevo Secretario General de Gobierno de que Oaxaca no quiere justificaciones si no avances, los oaxaqueños no necesitan pretextos si no resultados.
4.- En el gobierno aliancista era evidente el desorden, por lo que los ajustes implicaban poner el orden necesario para obtener una buena marcha de la administración. Es evidente que los ajustes implican fortalecer, revitalizar, ampliar y responsabilizar a la nueva Secretaría General de Gobierno y por lo tanto, a su nuevo Secretario, otorgarle también la confianza necesaria, que según la antigua Secretaria ella no lo tuvo. La misión del nuevo Secretario es afianzar y ampliar la coordinación del gabinete estatal para lograr la cohesión interna, para responder a las demandas de los ciudadanos, de aquí la creación de ocho subsecretarías regionales para acercar el gobierno a las comunidades. En este sentido, Gabino Cué entiende que fue un lamentable error, por hacerle caso a los panistas que son malos para gobernar, la desaparición de las delegaciones de gobierno, como es de sabios rectificar, la creación de las unidades de gobierno en las regiones pueda ayudar a la gobernabilidad y a una respuesta oportuna a las demandas de los pueblos, pues ha sido muy lamentable que el propio gobernador saliera al quite de los problemas de gobierno en las regiones.
Por otro lado, con estos ajustes no quiere decir el término del gobierno por cuotas si no por el contrario, las cuotas se ampliaron para unos, como es el caso del llamado grupo Oaxaca al que pertenece Jesús Martínez Álvarez.