Brilla legado musical de Álvaro Carrillo en el Cervantino
OAXACA, Oax., 16 de noviembre de 2015.- Con una inversión federal de 350 mil pesos, el gobierno de Oaxaca realiza la valoración y catalogación del patrimonio cultural tangible del estado, a través del Proyecto de Catalogación de Bienes Artísticos del Patrimonio Cultural en Recintos Religiosos.
En un comunicado, el gobierno de Oaxaca informó que estas acciones son encabezadas por la Secretaría de las Culturas y Artes (Seculta) en coordinación con el Instituto de Investigaciones Estéticas de la Universidad Nacional Autónoma de México (IIE-UNAM) y se realizan con el fin de proteger estos bienes mediante su registro y facilitar así futuras investigaciones, que sobre ellos puedan realizarse.
Los recursos para el Proyecto de Catalogación de Bienes Artísticos del Patrimonio Cultural en Recintos Religiosos se utilizan en el registro que especialistas del IIE-UNAM realizan sobre piezas de arte sacro de los siglos 16 al 19 localizados en diferentes templos del interior del estado.
En lo que va de 2015, se han registrado y catalogado 770 bienes artísticos en cinco recintos religiosos localizados en las regiones de la Cañada y Sierra Norte, particularmente en los municipios de Santa Catarina Lachatao, Ixtlán de Juárez, San Baltazar Yatzachi el Bajo, Santos Reyes Pápalo y Totontepec Villa de Morelos.
Dicho proyecto nació en 2011 y actualmente es coordinado por Pablo Amador Barrero, quien comanda a este grupo de especialistas que ya han recorrido varias comunidades oaxaqueñas y han registrado las piezas que resguardan en sus templos.
Representadas por esculturas, pinturas y otros objetos usados en el culto, estas piezas son documentadas mediante procesos que pueden durar varios meses con trabajo de campo en una primera etapa y luego en oficina a fin de generar un archivo completo.
Una parte importante del trabajo es la identificación de los autores de las piezas. Esto se hace buscando en determinadas partes de ellas las firmas de los realizadores, que pueden ser desde artesanos hasta famosos artistas de la época.
Las bases del proyecto que lleva cinco años ejecutándose en la entidad, establecen que la catalogación aporta un registro completo en favor del conocimiento de las obras de arte y de la formación de estudiosos en la materia.
Asimismo, a partir de ella, se obtiene un cedulario que puede ser de gran utilidad para proteger el patrimonio artístico contra el robo, el tráfico ilícito y las inadecuadas intervenciones de restauración.