Con detección oportuna se puede prevenir el Cáncer Cérvico Uterino: IMSS

México, D.F. 7 de junio 2012 (Quadratín).-Médicos especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Oaxaca, dan a conocer que el cáncer cérvico uterino es una de las principales causas de muerte por tumores malignos, sin embargo, se puede prevenir o curar, a través de la detección temprana con la prueba de Papanicolau que consiste en la introducción de un espejo vaginal que permite ver el cuello de la matriz y tomar una muestra de células, para identificar si son normales o presentan alguna alteración.
De acuerdo con el Jefe Delegacional de Prestaciones Médicas, Rosalino Vásquez Cruz, el cáncer cérvico uterino o de la matriz, es el crecimiento anormal de las células que se encuentran en el cuello de la matriz.
Al inicio, dijo, las lesiones son tan pequeñas que no se pueden a ver a simple vista y duran así varios años. Cuando el cáncer es avanzado se puede ver a simple vista en la exploración ginecológica, o causar otras molestias, entre ellas el sangrado anormal después de la relación sexual, entre los periodos menstruales o después de la menopausia, expresó Vásquez Cruz.
El también médico internista del IMSS, recomendó que el Papanicolau permite descubrir las displasias a tiempo para poder iniciar el tratamiento de inmediato y evitar que se conviertan en cáncer y se debe efectuar a partir de los 25 años de edad en todas las mujeres que han tenido relaciones sexuales. Después de dos exámenes anuales normales, lo indicado es realizar el examen cada tres años.
Sin embargo, después de dos resultados negativos, el Papanicolau se puede dejar de hacer en las mujeres de 65 y más años. Pero si nunca se ha hecho el estudio, sin importar la edad debe acudir a su clínica para hacerse la detección, pues hay que recordar que una mujer bien enterada sabrá cuidar mejor su salud, dijo el médico del IMSS.
Advirtió que cuando hay un resultado anormal, las células del cuello de la matriz, antes de ser cancerosas, tienen cambios que las hacen verse diferentes a las normales, a estas alteraciones se les llama displasias o lesiones precursoras del cáncer.
Si el resultado es positivo a displasias o cáncer la paciente se envía a una clínica de colposcopia en un hospital para corroborar el diagnóstico e iniciar el tratamiento.
Ante cualquier duda sobre el resultado y el tratamiento, las mujeres deben preguntar a su médico familiar para que le explique y le oriente sobre la identificación oportuna de enfermedades, finalizó.