Contraloría Social fortalece la participación ciudadana

México, D.F., 19 de enero de 2012 (Quadratín).-Para lograr un país más democrático y revertir la desconfianza e inconformidad de los ciudadanos hacia sus autoridades, los tres niveles de gobierno están obligados a impulsar espacios de participación efectiva y mecanismos que otorguen más poder a los habitantes como lo es la contraloría social, que confiere a la gente las facultades de vigilar, informarse y exigir cuentas a los servidores públicos encargados de la aplicación de los programas sociales.
En lo anterior coincidieron académicos, funcionarios y especialistas en la materia que intervinieron en la presentación del libro Contraloría Social en México, Experiencias de participación ciudadana y rendición de cuentas, cuya publicación coordinaron la Comisión Permanente de Contralores Estados-Federación (CPCE-F), la Secretaría de la Función Pública (SFP) y la Secretaría de la Contraloría y Transparencia Gubernamental de Oaxaca, como parte de los actos conmemorativos del XX aniversario de la Contraloría Social en México durante 2011.
En el evento, al que asistió la contralora Perla Woolrich Fernández, participaron con sus comentarios sobre la obra la subsecretaria de Control y Auditoría de la Gestión Pública de la SFP, Guadalupe Yan Rubio; el coordinador nacional de la CPCE-F, Jorge Shields Richaud; el investigador del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS) Unidad Golfo, Felipe Hevia de la Jara; el periodista y analista político Ricardo Raphael y el director de Transparencia Mexicana, Eduardo Bohórquez.
En presencia de titulares y funcionarios de las contralorías estatales -que se reunieron también para realizar la primera Reunión Plenaria de la Comisión Permanente de Contralores Estados Federación-, los ponentes subrayaron que la contraloría social tiene una doble potencialidad al ser un mecanismo de participación ciudadana pero también de rendición de cuentas que va de la mano con la lucha contra la corrupción y la forma de hacer un mejor gobierno, más eficaz y responsable.
En su oportunidad la subsecretaria de Control y Auditoría de la Gestión Pública de la SFP, informó durante 2011 se constituyeron 51 mil 874 comités de contraloría social, integrados por 157 mil 628 personas, que vigilaron el uso de recursos públicos por más de 48 mil millones de pesos, en 52 programas de desarrollo social.
Por su parte, el coordinador nacional de la CPCE-F, Shields Richaud, consideró que muchos retos que actualmente enfrenta la sociedad tienen perspectivas alentadoras, en la medida en que existe un involucramiento cada vez más activo de la propia sociedad en las tareas de gobierno.
Asimismo, el investigador del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS) Unidad Golfo, Hevia de la Jara, consideró que la publicación del libro es relevante, sin embargo, advirtió que el uso de la contraloría social como una herramienta de combate a la corrupción sigue representando un desafío enorme y es necesario impulsar su papel en lo que toca a prevenir la corrupción, y al mismo tiempo, promover una cultura que no tolera la corrupción.
En tanto, el periodista y analista político Ricardo Raphael, advirtió que datos estadísticos demuestran que el ciudadano tiene gran desconfianza e inconformidad frente al gobierno, aunque su participación en política y temas de gobierno no es muy intensa. Atribuyó esto a que hay una reforma cultural que va muy lenta, a diferencia de las reformas legales que ya han sucedido para darle una mayor participación en los asuntos públicos.
Por su parte, el director de Transparencia Mexicana, Eduardo Bohórquez, consideró la publicación un acierto. Reconoció que dos décadas no han sido suficientes para que las prácticas de contraloría social se hayan convertido en principios y valores de nuestra sociedad.
“Hemos sido extraordinariamente autocomplacientes con el tiempo, y pensamos que el país se puede mover al ritmo de sexenios o de decenios y no pasa nada. Al final, como los gobiernos son monopólicos, uno les puede pegar hasta que toda la confianza social se elimine y van a seguir siendo gobiernos y órganos legislativos”, agregó.
RECIBE CONTRALORA DE OAXACA NOMBRAMIENTO
Por otra parte, en el marco de la primera Reunión Plenaria de la Comisión Permanente de Contralores Estados Federación (CPCE-F), ante el secretario de la Función Pública, Rafael Morgan Ríos, la contralora Woolrich Fernández, recibió formalmente el nombramiento de coordinadora regional Centro-Golfo-Istmo, zona conformada por las entidades de Oaxaca, Hidalgo, Puebla, Tlaxcala y Veracruz, que como principal acción tiene la comisión de Contraloría Social.
Durante la reunión, las contralorías de los estados de la República, agrupadas en la CPCE-F, aprobaron su Plan de Trabajo para 2012 y anunciaron que adoptarán a nivel estatal procesos de mejora regulatoria, fortalecerán el Usuario Simulado y retomarán otras iniciativas de la Administración Pública Federal que le han reportado buenos resultados a la Federación.