
Mantiene SSPO activo el Plan de Apoyo a la Población en el Istmo
SAN BLAS ATEMPA, Oax. 23 de octubre de 2013 (Quadratín).- Los productores de cuatro comunidades de San Blas Atempa y Mixtequilla, cultivarán más de 150 hectáreas de flor de muerto en menos de una semana, que serán distribuidos en los mercados locales del Istmo de Tehuantepec.
Los productores de Puente Madera, Tierra Blanca, Montegrande, Santa Rosa de Lima (San Blas Atempa) y Guichibere (Mixtequilla), esperan obtener ganancias individuales hasta por 15 mil pesos, tan sólo para la producción mínima de una hectárea cultivada de flores como: cresta de gallo, cempasúchil, albahaca y guie yana, las principales que adornan los altares familiares en los hogares zapotecas.
Juan Sánchez, campesino de 50 años, tiene la esperanza que logre de esta cosecha alrededor de 15 mil pesos después de invertir por siete meses más de cinco mil pesos.
En Puente Madera, agencia de San Blas Atempa, Juan dedica la mitad del año, al igual que otros cincuenta campesinos de la comunidad zapoteca, al cultivo de las flores de muerto que comercializa en Tehuantepec, Salina Cruz y Juchitán.
La cosecha comenzará a partir de la próxima semana, aunque algunos ya empezaron a la recolección de las flores pues en algunas comunidades los preparativos para recibir a los muertos comienza este jueves 24 y concluye el 30 de octubre, siete días precisos para la llegada de los fieles difuntos, según la costumbre de los zapotecas del istmo.
En esos días las familias realizan rezos para iluminar el camino de los muertos recientes para que la llegada sea la adecuada a los hogares en su primer Todos Santos ( Xandu yaa).
Juan Sánchez, como casi todos los productores, sólo logró cultivar la mitad de su cosecha, una hectárea, debido a que las fuertes lluvias que azotaron la región lo afectaron. Él no recibió el apoyo de ninguna institución ante las pérdidas, por lo que sólo cosechará la mitad de lo que logró el año pasado.
“La lluvia ahogó la mitad de mi cosecha, sólo salvé lo que pude, el resto se necesitaba dinero para levantarlo. Ni modos, lo poco lo venderá mi mujer en Tehuantepec y Salina Cruz. Ahora sólo rogamos a Dios que haya buena venta, sino, perderemos más de lo invertido”, comentó el productor que la otra mitad del año se dedica a la siembra de maíz.
El trabajo de siembra que comenzó en el mes de abril concluirá en próximos días, por lo que los campos de la parte central del istmo ya están tapizados de rojo y amarillos, aromatizando el camino de los que regresan otra vez a la casa de los santos.