
El trasfondo del fondo en crisis de relaciones con EU
MÉXICO, DF, 29 de septiembre de 2014.- Esta semana se desarrollará en el Senado de la República, un interesante Seminario sobre Federalismo y Unidad Nacional, con la participación de los titulares de los tres órdenes de Gobierno -federal, entidades federativas y municipios-, así como los tres poderes, -Ejecutivo, Legislativo y Judicial-, autoridades universitarias, entre otros. Por supuesto es importante la presencia del Presidente de la República.
En materia del Federalismo Fiscal, es oportuno ante una realidad que no se puede ignorar, la de un centralismo creciente en todas las materias, pero particularmente sensible en el aspecto fiscal y donde hay mayores resistencias para cambiar.
En materia fiscal vivimos más en un régimen unitario, que en uno federal. Es claro que somos el país con el mayor centralismo tributario dentro de la OCDE, que en esa materia tenemos una estructura tributaria, donde el peso mayor de la recaudación se encuentra en los impuestos indirectos, y donde la dependencia de los ingresos derivados del petróleo, rondan las dos quintas partes de los ingresos corrientes y de las participaciones.
Particularmente en los últimos años hemos visto: el tránsito de una coordinación fiscal que siempre será perfectible, a una subordinación fiscal -como señalaba un ex Gobernador-; ha crecido la dependencia respecto a las transferencias federales; los pari passus para acceder al gasto federal, lesionan las finanzas locales, además de que la mayoría no tienen suficiencia presupuestaria, más cuando sus participaciones apenas rebasan en términos reales su nivel de 2008. La condicionalidad del gasto federalizado, está muy alejada de las necesidades locales actuales, como se ha planteado desde muchas instancias, incluida la ASF.
Resulta interesante que sea el Senado de la República, quien retome esta iniciativa, quizás tenga que ver que muchos gobernadores de todos los partidos, de los tiempos de la 1ª Convención de las Haciendas Públicas de 2004, sean hoy senadores y creo tienen claridad sobre el tema.
En la Convención en 2004, fue donde se discutió ampliamente una Agenda para fortalecer el Federalismo Fiscal, donde senadores y diputados participaron intensamente, pero no decidieron sobre los más de 300 acuerdos por unanimidad de la Convención, misma en que los gobernadores, sus secretarios de finanzas y los municipios jugaron un papel fundamental. Se avanzó en lo administrativo, no en lo legislativo.
La realidad hoy, es la de una inercia centralista en todos los espacios de la hacienda pública.
El tema no es nuevo para los legisladores: desde hace tiempo están en ambas cámaras iniciativas para incrementar el porcentaje participable y para que los estados tengan mayores facultades impositivas.
Hoy las entidades pierden en todo, destacadamente en el gasto en educación básica, claro algunas ganan y mucho, tratándose de un problema no generado por ninguna de las autoridades federales o subnacionales actuales, pero lo tienen que resolver. Es un tema que se debe ver en este Seminario o en la Conago.
Ojala este evento plural del Senado sea el primer paso para generar iniciativas que cambien positivamente el perfil del federalismo mexicano, en que no sigan perdiendo la mayoría de los estados y municipios, que el costo del ajuste sea parejo, no que haya entidades muy ganadoras y otras muy perdedoras y que los municipios sean tomados en cuenta, no sólo en los discursos, sino en los hechos y se eviten dramas como el de quererles quitar la administración del predial con acuerdos administrativos, que revierten los avances constitucionales.
Es una buena oportunidad para que la descentralización y el federalismo vuelvan a ser sinónimos. Que abandonemos la subordinación fiscal y regresemos a la coordinación fiscal.
David Colmenares Páramo ha sido Presidente del Colegio Nacional de Economistas