Cortinas de humo
-La de Michoacán
MÉXICO, DF. 23 de junio de 2014 (Quadratín).- La renuncia del gobernador aparente, pero electo de Michoacán, es el corolario de una tragedia que ni Sófocles describió, una mala administración y un mal manejo de la política económica y de la política – política. En el fondo no olvidemos que la economía es economía política.
Deja una deuda superior a 16 mil millones de pesos, equivalente al 91.3 por ciento de su PIBE, y en relación a sus participaciones, con mucho su principal fuente de ingresos. En cuanto a la mejora de la administración pública, en la adecuación del marco jurídico para la implementación del PbR y del SED, Michoacán está en el lugar número 32, con uno por ciento de avance. Sin descontar por supuesto lo heredado, como un alto nivel de endeudamiento, bajo nivel de recaudación de ingresos propios, o un ejercicio del gasto público desordenado y opaco, no mejoró, empeoró y hoy depende totalmente del programa para su desarrollo integral que encabeza el Gobierno Federal.
Desde un principio se vio una administración pública inmadura, sin experiencia y opaca, no sólo en lo administrativo, destacadamente en el manejo de las finanzas públicas y en materia de control. Ha sido muy analizado en la opinión pública la parte política y de seguridad, y los avances se deben a la intervención del Gobierno Federal..
Hubo inestabilidad en la administración pública, los secretarios de finanzas o de contraloría, no son los que empezaron, por ejemplo.
En el tema de las buenas prácticas en materia de presupuesto, es claro que si no hay transparencia, con vigilancia ciudadana, y rendición de cuentas confiable, poco se puede lograr. Por supuesto si no hay un congreso local fuerte -incluso a veces es muy sano tener gobiernos divididos-, un órgano garante de la transparencia independiente y con autonomía presupuestaria, un órgano superior de fiscalización por lo menos con cierto margen de autonomía, los resultados seguirán siendo negativos y confusos.
Entre 2011 y 2012, el BID y la SHCP instrumentaron un Programa para apoyar la implementación del Presupuesto base Resultados en 12 entidades federativas, en 11 sus gobernadores firmaron el Convenio, el de Michoacán no lo firmó. El mismo consistía en un apoyo financiero sin recuperación, de un millón de dólares, para la administración central y cinco municipios por lo menos. Lo coordinó por Hacienda Agustín Caso. Datos del Programa se pueden ver en el trabajo sobre PbR que aparece en la página de la Auditoría Superior de la Federación.
Respecto a los avances en su instrumentación, hace poco ponderaba los avances de Hidalgo, sin embargo Michoacán está por debajo de la media, datos más detallados en la página de Transparencia de la SHCP. El otro tema importante es la armonización de la contabilidad gubernamental.
En cuanto a la deuda pública, su administración triplicó en declaraciones la recibida, sumando las ADEFAS, y compromisos presupuestales futuros.
Cierto es víctima como otras entidades, del bajo porcentaje participable y del deterioro en términos reales de las transferencias, tienen un servicio de la deuda que ya se refleja en el presupuesto. No tienen avances en materia de recaudación de ingresos propios o de un manejo más eficiente de su presupuesto. Sufre de déficit en el manejo del gasto educativo, la fórmula de 2008 también les ha pegado, tienen observaciones pendientes en la ASF, y sus resultados son negativos, lo cual se refleja en lo que sucede en la entidad.
El nuevo gobernador, leo que era el Rector, enfrenta un reto mayúsculo, ya que llega a cerrar, a mantener la relaciones con el Gobierno Federal, sin cuyo apoyo Michoacán estaría totalmente destrozado, y debería atender lo referente al Presupuesto.