
Día mundial de la justicia social
Oaxaca, Oax. 18 de febrero de 2013 (Quadratín).- Con los resultados preliminares del crecimiento económico de los miembros de la Unión Europea, y en especial los de la Zona Euro, el último trimestre de 2012, decrecieron respecto en el promedio anual, menos 0.6 y menos 0.9 % respectivamente, cifra mayor desde 2009. A esto se le llama recesión, producto de ajustes presupuestarios a la baja, con alto costo social y político, impulsados por los organismos europeos, y a nivel de País por Alemania, para contar con recursos para rescatar a los bancos europeos, generando dramas sociales como los de Grecia y España particularmente, sólo veamos los suicidios por los desahucios.
Esto trae nuevamente a cuentas el debate que en México se dio en 2009-2010 cuando cinco o seis premios Nóbel de Economía, aconsejaron impulsar la inversión y apostarle al mercado interno, en sentido contrario a los recortes presupuestarios, para lograr niveles importantes de crecimiento económico, con empleos productivos para la población, particularmente los jóvenes, mejorar el poder adquisitivo de su salario, reducir la economía informal con el crecimiento del formal y desalentar la ocupación en actividades ilícitas, sin embargo estos economistas no fueron oídos e incluso algunos fueron descalificados. El hecho es que el promedio de crecimiento del PIB, de 2007 a 2012 fue inferior al 2 por ciento. Ya se ha informado como de 2008 a 2010 creció en 3 millones de personas la indigencia cifras de CEPAL- y como de 2012 a 2012, siguió creciendo como mencionó el Subsecretario Javier Guerrero. De ahí la necesidad de realizar reformas importantes, orientadas a crecer más y de manera sostenida, en base al fortalecimiento del mercado interno, el desarrollo regional y al diseño de políticos orientadas al crecimiento del empleo en el sector formal de la economía y fundamentalmente en las regiones.
Pero hoy la discusión se da en Europa, donde por lo menos las políticas de austeridad han tenido efectos devastadores en las economías de Grecia, Portugal, Irlanda, Italia y España, e incluso el crecimiento alemán ha disminuido. El diario El País recupera hace unos días la referencia de un comentario crítico del FMI en diciembre de 2012, a la austeridad europea, cuyo resultado final ha sido recesión y altos costos sociales. La nota menciona que el Vicepresidente de la Unión Europea, no está de acuerdo con las observaciones, -después matizadas- del FMI a la política impulsada por Bruselas. Dice la nota que los ajustes de Europa son un fracaso, porque no tienen en cuenta el verdadero impacto de la austeridad sobre el crecimiento
la idea es sencilla: si toda la eurozona aplica a la vez agresivos recortes, el resultado e una recesión y una trampa, y la realidad está dando la razón a quienes señalan lo anterior.
Además de la reducción del crecimiento el último trimestre, el saldo anual es negativo y recesivo, por supuesto más para unos países que para otros. Veamos primero a los afectados por la austeridad extrema: Grecia, España, Portugal e Italia, que decrecen -6.0, -1.8, -3.8, -2.7 respectivamente.
Incluso Alemania sólo crece 0.4 % – con caída el último trimestre- Holanda menos 0.9 %, Francia menos 0.3%. Sólo crecen los pequeños países como Letonia 5.7%, Estonia 3.4 %, Lituania 3.1% y Eslovaquia 1.2%, entre otros, de acuerdo a datos de Eurostat.
Con razón señala Claudi Pérez que el auge y no la depresión. Es la hora adecuada : la UE desoye desde hace tiempo las lecciones de la historia económica, envuelta en esa especia de celo mesiánico que consiste en acometer reformas y recortes – a toda velocidad, en todas partes a la vez- con la esperanza de que la economía se recupere. Pero lo que sucede de momento es lo contrario. (El País. 15.02.2013).
Hoy domingo siguen las noticias, destacadamente el incremento de la deuda de España, que aumentó 146 mil millones de euros en 2012, en pleno experimento recesivo, con lo que ya debe 882 mil millones, su nivel más alto desde hace 102 años y un crecimiento de la misma que supera el de 2009. Representa el 84 % del PIB, rebasando casi en cinco puntos la meta de las autoridades y ya hay quien estima que será de 95 % en 2015. En fin es lo que pasa del otro lado del Mundo.
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