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OAXACA, Oax. 22 de junio de 2015.- La depresión en los jóvenes es una enfermedad que suele confundirse con signos de rebeldía o simple falta de interés hacia las actividades cotidianas, por ello es fundamental que los padres de familia estén atentos a las actitudes y conductas de sus hijos.
El psicólogo del Hospital General de Zona No.1 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Jaime Ernesto Vargas Mendoza, explicó que son varios los factores que inciden para que un joven sufra depresión, sin embargo es en la adolescencia cuando se presenta con mayor incidencia.
En la etapa de la adolescencia, las personas pasan por múltiples conflictos en su personalidad, se están convirtiendo en adulto y se generan nuevas expresiones sociales, ambientales y familiares que si no son bien manejados, pueden derivar a un cuadro depresivo.
En un comunicado de prensa el psicólogo del IMSS detalló que los conflictos familiares es uno de los factores que más inciden en la depresión en los jóvenes, ya que tienden a sentir que las crisis de parejas de los padres, los divorcios y las separaciones son culpa de ellos, lo que genera un sentimiento de angustia.
Es importante que ante los indicios de una depresión los padres de familias acudan a un especialista.
Los principales signos son: repentino bajo rendimiento escolar, apatía, desgano y desmotivación, impulsividad y actitudes de conflicto, falta de apetito y descuido en su aseo e imagen personal, crisis de llanto y aislamiento.
La orientación de un personal calificado es vital en estos casos y muchas veces ayuda tratar al cuadro familiar completo, pues es allí que suele estar el foco del problema.
Actualmente más jóvenes pasan por un problema similar, lo que ha convertido a la depresión en la principal causa de enfermedad y discapacidad.