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MÉXICO, DF. 7 de febrero de 2014 (Quadratín).-El secretario de Educación Pública (SEP), Emilio Chuayffet, informó que en un lapso de dos meses y medio, más de 500 maestros de diferentes entidades de la República fueron cesados de sus labores por faltar a clases y participar en manifestaciones en contra de la reforma educativa.
De acuerdo con una nota de MILENIO, al entrevistarlo al término del inicio del primer Foro sobre Educación Básica, Chuayffet señaló que además de los despidos, también se han establecido sanciones administrativas.
Aseguró que aún cuando los docentes tengan derecho a manifestarse, no deben faltar a su responsabilidad en las aulas.
«El maestro tiene derecho a la protesta como cualquier ciudadano y puede ejercerla con plenitud siempre y cuando no falte a clases», dijo.
El titular de la SEP informó que los despidos no se pueden revocar, pero sí se pueden impugnar ante el Poder Judicial.
En su discurso al inaugurar el primero de los foros, el secretario de Educación dijo que es la hora de la educación en México, por lo que llamó a no desaprovechar y a caminar juntos «en la transformación de un sistema que a nadie satisfizo en el pasado y que hoy nos ofrece la ventana de oportunidad de cambiarlo y de enriquecerlo».
El funcionario también pidió que no haya intereses personales sobre el propósito de construir un sistema robusto de educación en el país.
«Que nadie pueda decir que las responsabilidades recaen en lo que hasta aquí ocurrió en tal o cual sector, porque parcializar la respuesta es faltar a la verdad; que nadie quite al maestro su papel central y la dignidad que ha tenido siempre y su influencia en la vida y la formación de cada uno de nosotros», subrayó.
En la Escuela Nacional para Maestras de Jardines de Niños, a donde acudieron más de 820 personas y se presentaron 156 ponencias, Emilio Chuayffet recordó que la reforma educativa dispuso la revisión del modelo para enseñar.
Destacó que ahora ese proceso se hace a través de una amplia convocatoria dirigida a la sociedad en su conjunto y que no tiene más propósito que escuchar a todo aquel que quiera intervenir.