Dilema del PRI es democracia o imposición: Max Vargas

San Miguel Monteverde, Teposcolula, Oax., 24 de septiembre de 2011 (Quadratín).- El legislador local e integrante de la fracción parlamentaria del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Max Vargas Betanzos, del XVI Distrito de San Pedro y San Pablo Teposcolula, realizó una gira de trabajo en esta agencia municipal, en la cual celebró una reunión de trabajo con cientos de pobladores de esta demarcación y su propia autoridad constitucional.
Acompañado de su homólogo en la LXI Legislatura local del Honorable Congreso del Estado, Carlos Martínez Villavicencio, del XXI Distrito de Juxtlahuaca, entre otros, ratificó su compromiso legislativo así como de acompañamiento institucional en atención a las múltiples demandas de los habitantes y sus comunidades, a la vez que cuestionaron la parálisis en las acciones en materia de infraestructura social y urbana derivado de la inanición de acciones tanto del gobierno federal como estatal en detrimento de los municipios más marginados de esta región de la Mixteca.
Posteriormente, en entrevista, Vargas Betanzos, integrante de la corriente crítica del PRI, al ser cuestionado del venidero proceso de selección de candidatos a diputados federales así como senadores de su instituto político enfatizó que no sólo están trabajando en el aspecto legislativo, sino también, en las gestiones que no rompan con el estado de derecho para bien de la población.
“Por lo mismo, acotó, estamos construyendo al interior del Revolucionario Institucional los cimientos de la democracia para su desenvolvimiento que permita aglutinar a la mayoría de ciudadanos interesados en la participación política”.
Indudablemente que auguramos el éxito del PRI en la medida en que se ponga en práctica la democracia con la participación de todos los militantes, de todos los sectores, de todos los adherentes, de todas las organizaciones sociales, más no con la hegemonía de una camarilla desprestigiada que asumió la representación del partido de manera impuesta sin participación de los priistas oaxaqueños. El dilema es: democracia o imposición, con la primera solución el PRI gana, con la segunda pierde; así de fácil.
Demandó que en el venidero proceso electoral el PRI retome sus principios, su esencia y razón de ser, pues hemos sido el partido que construyó al México moderno y que puede y debe hacer al México del Siglo XXI pero todo empieza desde y con la militancia.
Agregó que al igual que muchas expresiones del PRI, está en contra de las imposiciones de delegados a su próximo Congreso, así como de candidatos que provengan de una camarilla que pretenda manipular al partido. “Esto, desde luego no vamos a permitir, y nos pronunciaremos en contra de aquellos que se empeñen en así querer hacerlo, pues se verán disminuidos al momento real de las votaciones, porque lo único que estarían propiciando es una desbandada de la militancia.
Consideramos que es necesaria de la participación de la militancia priista en todos los actos del PRI que tengan que ver con el proceso de selección de delegados al referido Congreso así como de candidatos, pues de no hacerlo así se estaría socavando la base partidista”.
Vargas Betanzos, puntualizó que cualquiera que sea, dirigente actual, legítimo o ilegítimo con representación formal o detrás de bambalinas merece, dijo, nuestro rechazo y al igual que de toda la militancia, pues no es válido, justificó, que por intereses propios, de grupo y fuera de los principios del PRI, de su programa de acción y de los estatutos quieran convertirse en dueños de horca y cuchillo, para designar a delegados y candidatos
La vieja escuela del PRI debe extinguirse ya ha sido rebasada y aquellos que alcanzaron el poder a través de la operatividad son personajes sin sustento ideológico que sólo causan daño al priismo pero principalmente a la nación, ya que sólo han puesto en práctica sus corruptelas desfalcando y desviando los recursos de los mexicanos y oaxaqueños para propio beneficio creyendo que son los iluminados cuando que solamente se han convertido en el azote de la sociedad oaxaqueña afectando proporcionalmente a todos por igual.