Goleada diabólica del Toluca al Puebla
MÉXICO, DF. 1 de junio de 2014 (Quadratín).- Javier Aquino, centrocampista mexicano del Villarreal, recibió en Shanghai la llamada de la Selección Mexicana para acudir al Mundial. Lo hizo estando con su Club en plena gira por el país asiático, y a dos días de que esta finalice.
El futbolista, originario de San Francisco Ixhuatán, reconoció que la noticia fue «una gran alegría», aunque ante todo dijo que lamentó «la lesión de su compañero Luis Montes, y que por esa desgracia haya quedado fuera de la opción del Mundial». El centrocampista aseguró que «Dios lo puso en este mundial» cuando ya no tenía opciones para ello.
«Desafortunadamente para un compañero, este se lesionó y ello me dio la oportunidad de poder jugar un Mundial, lo siento mucho por él y por su mala suerte, pero Dios sabe porqué hace estas cosas», dijo.
Cuestionado por cómo recibió la noticia y sus sensaciones, Aquino apuntó, «la verdad es que no lo esperaba por cómo se habían dado las cosas, pero uno siempre está preparado por si hay suerte y llegó mi gran oportunidad. Dios me puso ahí».
Aquino se mostró eufórico y siguió apuntando que «con 24 años ir a un mundial es algo muy grande, por ello voy a dar todo de mi parte para poder hacer las cosas lo mejor posible».
De la misma forma admitió que fue «duro quedar fuera de la lista», y explicó que «quedar fuera fue muy duro, pero no hay que mirar atrás, ahora sólo queda mirar hacia adelante y luchar», sentenció.
Sus compañeros del cuadro de Villarreal lo festejaron con una foto donde se muestra cómo lo avientan al aire, en señal de beneplácito por su llamado.