Eleusis Córdova* / La represión contra antorcha se amplía

Oaxaca, Oax., 7 de agosto de 2009 (Quadratín).- El miércoles de la semana pasada, los principales diarios poblanos dieron a conocer (como noticia de primera plana) el intento de l9 diputados de destituir a Rocío García Olmedo, presidenta de la Comisión Inspectora del Congreso del Estado; comisión que, entre otras funciones, tiene la de supervisar, rechazar o aprobar las cuentas públicas de los 2l7 ayuntamientos que conforman la entidad.
Esta noticia me llamó la atención, esencialmente porque me dejó la impresión de que estamos en manos de una clase política mafiosa, que, en aras de acumular poder que se materializa en canonjías, influencia, dinero y otras, no se detiene ante nada, ni le interesa la reacción que su actuar provoque en la opinión pública, pues, desde su perspectiva, lo que importa es quedar bien con el poderoso y, si para lograrlo hay que perder hasta la dignidad, lo hace, pues espera (siempre desde su perspectiva) una vida llena de placeres, poder y riqueza.
El viernes 31 de julio, el diario La Opinión dio a conocer que, durante la última sesión del Congreso del Estado de Puebla, fueron rechazadas cuatro cuentas públicas de diferentes ayuntamientos, entre ellos: Tecomatlán, por irregularidades que presentaban, “mismas que ya habían sido aceptadas por unanimidad por la Comisión Inspectora que encabezaba Rocío García Olmedo.” El diario Milenio consignó: “las cuentas públicas de los municipios de Chignahuapan, Zacatlán, San Matías Tlalancaleca y Tecomatlán, correspondientes al ejercicio fiscal 2008, regresaron a la Comisión Inspectora a petición de 20 diputados priistas (¡ojo!), sin que justificaran su negativa para aprobarlas en la sesión de ayer”.
Por lo hasta aquí narrado, hoy me queda claro, el intento de destituir a la licenciada García Olmedo era un castigo planeado desde las altas esferas del poder estatal, por haber procedido con honradez y haber aprobado la cuenta Pública del Ayuntamiento de Tecomatlán y de otros municipios, y no haberse prestado al capricho de los que se creen dueños del estado, que le ordenaron no aprobarla, para, desde la Secretaría de Gobernación, desacreditar a Antorcha Campesina y encarcelar a uno de sus miembros distinguidos.
Esta aseveración se confirma, porque en la página web del Congreso del Estado se dio a conocer el 28 de julio la aprobación de 52 cuentas públicas, entre ellas la del municipio de Tecomatlán, por haber cubierto -en tiempo y forma debida- las observaciones que el órgano de Fiscalización había señalado. La negativa de los diputados priistas de aprobar la cuenta pública de Tecomatlán no es sino otro eslabón más de la cadena represiva que el Gobierno del Estado ha instrumentado en contra de la lucha que, durante más 80 días, viene librando Antorcha Campesina.
Este nuevo suceso viene a demostrar cuánta razón nos asiste cuando afirmamos que Fernando Cuellar y Rafael Cabrera declaran en contra del Movimiento Antorchista, porque son ventrílocuos de Gobernación, que no defienden mas causa que la de su estómago y que no son más que, el primero, un borrachito de los Sapos y, el otro, un verdadero lenón; ambos, eso sí, ambos por obra y gracia del presente gobierno estatal, disfrazados de luchadores sociales. Ello demuestra contundentemente que todas las declaraciones de “comerciantes, músicos y vendedores” son un vil invento de Gobernación, para encubrir cualquier acto represivo que el gobierno de Mario Marín pudiera emplear en contra de nuestro movimiento.
Más aún, confirma lo que Antorcha Campesina y algunos periodistas valientes y honrados afirman en sus columnas políticas: padecemos un gobierno prepotente, dictatorial, enemigo del diálogo y, por lo tanto, amigo de destruir cualquier disidencia, del tipo que sea, por la vía que sea, inclusive la de inventar delitos. Hoy, una mafia gobierna a Puebla. ¿Optaremos los poblanos por otros 6 años de lo mismo? Ojala la dignidad perdida vuelva a surgir en cada poblano y optemos por un gobernante honrado, limpio, justo, ecuánime y respetuoso del pueblo, y de sus leyes. Hay que terminar con la dictadura que padecemos.

*Dirigente del Movimiento Antorchista en la mixteca poblana.