Disuade Policía municipal violencia contra mujeres en Oaxaca de Juárez
OAXACA, Oax. 10 de mayo de 2014 (Quadratín).- “Rosa” quedó viuda muy joven. Licenciada en Ciencias de la Comunicación, encontró pronto trabajo de base en una oficina gubernamental en Oaxaca. Ahí conoció a “Beto”, hombre de más años que ella, con un matrimonio anterior, pero que le agradó, y consintieron poco tiempo después en casarse.
Ella ferviente cristiana. Él, hombre trabajador, fotógrafo también en una oficina de gobierno. La vida parecía sonreírles. Nació su pequeña, mujercita. Todo caminaba de maravilla.
Pero una mañana, después de que “Beto” fue a hacer ejercicio, se metió a la ducha… y no salió más. Un infarto le quitó la vida. La nena tenía apenas un año de edad.
La vida le cambió 180 grados a “Rosa”, que con su fe en Dios pudo sobrevivir y sacar adelante a su pequeña, que hoy tiene 16 años.
Ella, además de su base en el gobierno, heredó la base laboral de su esposo en una oficina educativa. Trabaja los dos turnos, se divide en la atención a la hija; sus padres le ayudan en el ajetreo cotidiano.
No le va mal económicamente, sólo que invierte la mayor parte de su tiempo en los empleos, y en atender a sus padres y la ahora adolescente.
MADRES-PADRES
Como el de “Rosa”, el 26 por ciento de los hogares oaxaqueños es sostenido por una mujer y para el 2030, se estima que será el 30 por ciento, según cifras de la Dirección General de Población.
Asimismo, de acuerdo con la Encuesta Nacional Sobre Uso del Tiempo (ENUT 2009) y que coordinaron el Inmujeres y el Inegi, las mujeres dedican 23.6 por ciento de su tiempo semanal al trabajo doméstico y los hombres 7.3.
En cambio, el trabajo extradoméstico representa sólo el 11.6 por ciento a diferencia de los hombres que llega a 30.1 por ciento. En las actividades relacionadas con el estudio, las mujeres invierten 6.1 por ciento de su tiempo semanal; los hombres 7.1 por ciento.
A la convivencia social, la recreación, el juego, la cultura, el deporte y la utilización de medios masivos de comunicación, las mujeres asignan 13.9 por ciento de su tiempo y los hombres el 18.6 por ciento.
Asimismo, las mujeres dedican en promedio 15 horas a la semana a la preparación y servicios de alimentos para los miembros del hogar y los hombres, en cambio, cuatro horas. En actividades de tipo doméstico y de cuidado de personas como apoyo para otros hogares y al trabajo comunitario o voluntario, las mujeres dedican ocho horas a la semana en promedio y los hombres 5.4 horas.
SITUACIÓN CONYUGAL
La dependencia gubernamental detalla que desde la perspectiva sociodemográfica, el estudio de la fecundidad ha intentado identificar los determinantes sociales, económicos, culturales e institucionales que intervienen en los patrones sexuales y reproductivos de la población.
Indica que en la práctica, la experiencia de la maternidad está estrechamente ligada al inicio de la vida en pareja y que de acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica 2009, las mujeres en edad fértil en el estado, se casan o se unen por primera vez a los 20 años en promedio y la edad promedio en la que tienen su primer hijo es a los 21 años.
Por otra parte, según las cifras 2010 que el Consejo Nacional de Población publicó sobre los Perfiles de Salud Reproductiva por entidad, dentro de los datos referentes al inicio de la vida sexual de las mujeres adolescentes (15 a 19 años), destaca que la edad mediana de la primera relación sexual es a los 16 años y solo tres de cada 10 utilizó algún método anticonceptivo en su primera relación sexual.
De la misma manera, la prevalencia anticonceptiva (mujeres en edad fértil y sexualmente activas que utiliza algún método anticonceptivo) en Oaxaca es de 63.1 por ciento cifra menor a la nacional que es de 72.3 por ciento.
Por último, expone que de acuerdo con el Censo de Población y Vivienda 2010, en Oaxaca la situación conyugal de las mujeres de 12 años y más (76.09 por ciento de la población total femenina) se distribuye de la siguiente manera:
Casi cuatro de cada de 10 (33.7 por ciento) son solteras, el 39.2 por ciento son casadas, un 13.1 por ciento viven en unión libre, el 4.7 por ciento están separadas, un 0.73 por ciento divorciadas y el 8.3 por ciento enviudaron.