En cuaresma incrementan intoxicaciones por mariscos y pescado crudo

Oaxaca, Oax. 4 de abril del 2012 (Quadratín).- En tiempos de cuaresma hay que evitar consumir mariscos y pescados crudos para prevenir intoxicaciones, que en estas fechas se incrementan hasta en un 15 por ciento, sobre todo los afectados son niños menores a los cinco años de edad, debido a que aún no se desarrollan completamente sus defensas inmunológicas ni en su estómago pues hay el suficiente ácido y moco gástrico para protegerlo.
De acuerdo con médicos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Oaxaca, el calor favorece una mayor reproducción de los gérmenes que causan las intoxicaciones, y una descomposición más rápida de los alimentos, especialmente de los productos del mar (mejillones, camarones, ostiones, almejas y pescados, entre otros). Por eso estos alimentos de preferencia deben ser fritos o cocidos.
En ese sentido, el jefe de Prestaciones Médicas de la Delegación IMSS en Oaxaca, Rosalino Vásquez Cruz, advirtió que los menores de un año por ningún motivo deben consumir mariscos, ya que en estos además de la intoxicación se incrementa el riesgo de padecer alergias.
Los tóxicos de los mariscos se pueden manifestar también con asma, rinitis y dermatitis y no sólo con una enfermedad del estómago.
El también médico internista explicó que los efectos iniciales de una intoxicación por mariscos o pescado son: náusea, vómito, diarrea y dolor abdominal (cólicos); este cuadro clínico es pasajero, ya que al comenzar a trabajar la defensa del sistema inmunológico los efectos se autolimitan a uno a dos días. Sin embargo, hay que acudir al médico desde que se manifiestan los primeros síntomas.
También advirtió que nunca se deben suministrar antibióticos y mucho menos anti diarreicos, ya que estos últimos sólo empeoran la intoxicación y causan inflamación y parálisis del intestino, el cual puede perforarse y generar así una infección generalizada (sepsis).
El doctor Rosalino Vásquez Cruz indicó que es muy importante mantener al niño hidratado a través de la ingesta de Vida, suero oral y de abundantes líquidos. La alimentación debe consistir en fruta, verdura y pollo hervido, en la cantidad y el tiempo que apetezca el paciente.