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IGUALA, Gro. 24 de octubre de 2014.- Las fosas que encontraron policías comunitarios en Filo de Ganaderos, cerca de la Loma del Zapatero, pudieron haber sido reutilizadas por el crimen organizado o en su caso, las autoridades ministeriales, periciales, policiacas y forenses no habrían hecho bien su trabajo de investigación a la zona y la recolección de evidencias y restos humanos.
Esto debido a que las excavaciones ubicadas por la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) desde la tarde del jueves, fueron las mismas que exploró las autoridades federales desde la semana pasada y de donde ya se había extraído un indeterminado número de restos o cuerpos humanos.
Este viernes, reporteros de la fuente y enviados especiales pudieron llegar hasta la zona de las fosas.
Ahí se corroboró la presencia de ropa, zapatos, cobijas, juguetes y otros objetos tirados cerca de las fosas clandestinas.
El lugar se ubica a unos 20 minutos de traslado (cerro arriba) en vehículo, de la colonia Loma del Zapatero, al poniente de Iguala. Hay varios sembradíos de maíz y constantemente cruzan por un camino central los campesinos, muchos montados en bestias. Hay también mucho ganado suelto. La vegetación es seca. Los nopales y espinos abundan.
Se ingresa a la zona de fosas por una vereda donde se empiezan a notar restos de trapos viejos, juguetes, bolsas de pañales vacías y otros artefactos. También hay guantes y cubrebocas.
Caminando por esa vereda entre arbustos, unos 100 metros adelante se encuentran las fosas. Hay marcas de aerosol sobre el suelo, pequeños huesos, restos de ropa y plástico derretidos y botes de refresco y cerveza quemados.
Algunos de estos huelen a gasolina aunque los policías ciudadanos creen que se usó ácido para tratar de desaparecer evidencias.
Hay cinco fosas excavadas donde la UPOEG ubicó solo retazos de carne humana. Se puede notar otra en la que no fue explorada y otro hueco bastante pequeño que al parecer apenas estaba siendo cavado.
La Policía Comunitaria y ciudadanos de Iguala subieron este viernes desde las ocho de la mañana a las fosas y, cerca de las 10 de la mañana arribaron elementos de la gendarmería nacional para resguardar la zona que en ningún momento fue acordonada.
Llegaron más tarde peritos de Ministerio Público Federal pero nunca llegó Semefo.
Pasado el mediodía se retiraron los comunitarios y, 20 minutos después hicieron lo mismo las autoridades federales. Ni peritos ni gendarmes inspeccionaron a detalle la zona, solo se limitaron a aclarar que en el lugar ya habían hecho investigaciones y extraído los restos humanos desde la semana pasada, esto, a pesar de que los comunitarios advirtieron que lo que hallaron era carne fresca.
En el lugar se pudo captar el olor fétido que desde ayer, los comunitarios advirtieron que se percibía: «una pestilencia insoportable de restos humanos recién tirados ahí». Efectivamente, no había gran cantidad de huesos más que uno muy pequeño señalado con pintura de aerosol.
Lo que se pudo notar en el lugar es que las fosas fueron reutilizadas ante la nula presencia policial, o bien, en las pasadas excavaciones realizadas por autoridades federales, no recogieron para investigar todas las evidencias y los restos humanos.
Sin embargo, de acuerdo a la UPOEG, las condiciones de la carne encontrada y la versión de vecinos de la zona en el sentido de que por la noche se siguen escuchando lamentos, podría ser verídica la primera de las dos versiones.
Otro dato importante para suponer que las fosas fueron reutilizadas, es que no fue hallada la cinta de acordonamiento de la PGR que las autoridades dejaron la semana pasada tras su inspección.
Esta mañana a su llegada a la zona de las fosas, policías comunitarios detectaron una casa de seguridad cerca de esa zona, de done al notar su presencia, al menos siete sujetos armados salieron corriendo para refugiarse entre los cerros.
Después de la una de la tarde de este viernes, las fosas quedaron sin resguardo policial y sin haber sido investigadas. Los restos de carne hallados por la UPOEG quedaron semienterrados.