
Reforma de maíz transgénico: ¿camino a soberanía alimentaria de México?
Oaxaca, Oax. 18 de agosto del 2011(Quadratín).- Recientemente nos enteramos por las noticias que el Partido Revolucionario Institucional, está pidiendo a cambio de apoyar las reformas de seguridad nacional y la reforma política, que se modifique la ley de coordinación fiscal, con el objeto de obtener mayores recursos para los Estados que gobierna este partido.
Hoy se sabe que, el Estado que gobernaba el actual presidente del PRI Humberto Moreira, en su administración la deuda creció exponencialmente de 320 millones de pesos a 31,000 millones de pesos, situación que inmediatamente nos permite pensar y preguntarnos:
¿Es correcta esta actitud de pedir a la federación que pague las deudas de los estados y en estas condiciones de crisis global?
¿Dónde están las leyes que tengan que determinar los mecanismos de endeudamiento de los estados?
¿La deuda de los estados fue invertida con base en las necesidades económicas y sociales de la población o fue invertida en procesos electorales?
Al analizar esta situación, en primera parte creo que la deuda de muchos estados, no tiene un fundamento eminentemente económico, sino más bien político, en el cual se hace inversión pública y gasto social anticipado, para que lo pague el gobernante que viene, más allá de los costos que representa la deuda por el pago de interés, se trata de casos como el de Oaxaca, que incremento su deuda y que en estos días se hará pública.
La principal inversión de esta deuda para el Estado, fue para la construcción de la ciudad Judicial y ciudad administrativa, de la cual hoy se habla de que existen cuestiones irregulares, en su carácter de construcción, financiamiento y la metodología de la aplicación de los fondos. El principal argumento de la administración pasada, fue que a mediano y largo plazo el gobierno generaría ahorros, los cuales se aplicarían en otro tipo de proyectos para la población. La idea es muy buena, sin embargo la realidad nos intenta decir otra cosa. Por lo que es necesario dar una buena explicación a la población de esta inversión y deuda.
En segundo término, en casos como el de nuestro Estado, la inversión de la deuda tuvo realmente un sentido social o sólo fue para manejar la imagen de un gobierno moderno e inteligente, digo, porque lo mismo sucede con nuestros presidentes municipales, que no quieren invertir en obras prioritarias como agua, luz y drenaje. Sólo quieren obras donde se magnifique a su persona. Que provecho tienen estas obras, para generar empleos permanentes, inversión en el Estado y otras que mejoren las condiciones de vida de los oaxaqueños.
Como es posible que ahora se quiera que la federación o sea todos nosotros, porque ellos sacan el dinero de nuestros impuestos, paguemos la deuda que sus caprichos produjeron. Como es posible que viendo los problemas globales de la economía en Europa, E.U y otras partes del mundo, se permitan estas conductas que si van a repercutir en nuestros bolsillos y que ponen en riesgo a las variables fundamentales de la economía de un país, como lo es el déficit público, que significa gastar más de lo que se recaudara por concepto de impuestos.
Es correcto o inmoral, independientemente del partido que sea, pretender chantajear a la federación para que a cambio se de dinero, cuando estos cambios a la leyes propuestas significan mejoras para los ciudadanos, pues en verdad, es a nosotros a los que nos están usando como carne de cañón para conseguir dinero.
[email protected]