Seis años de impunidad: no hay #JusticiaParaSol
Oaxaca, Oax., 19 de marzo 2011
Los motivos de la separación
En virtud de la tendenciosa declaración realizada públicamente por el otrora líder moral del Movimiento de Resistencia Civil Pacífica de San Blas Atempa: el doctor Francisco Salud Bautista y dado que esta afecta de manera directa tanto al Frente Popular Revolucionario, como al MRCP y la persona de los camaradas Javier Aluz Mancera y Ricardo Gallegos Castro, haciendo uso del derecho de réplica, la Comisión Política del MRCP, solicita un espacio público en los medios de comunicación para hacer la siguiente exposición de hechos y motivos políticos que han dado paso a la declarada separación del doctor y su pequeño grupo de personas que encabeza.
1.- Es totalmente falso el rompimiento entre el Movimiento de Resistencia Civil Pacífica y el FPR, puesto que este espacio se ha constituido como un referente de unidad entre las distintas fuerzas políticas democráticas y revolucionarias del municipio que tenemos representatividad en los sectores de la población. Debemos recordar que el MRCP en ningún momento es patrimonio del doctor Francisco Salud Bautista o de un pequeño grupo de personas, sino de todo un pueblo en lucha que ha dado importantes ejemplos de combatividad y heroísmo en distintos periodos de la lucha histórica de San Blas Atempa.
2.- Como ejemplo de lo anterior, se debe destacar el hecho de que una buena parte de los integrantes del entonces plural y democrático Consejo Ciudadano Indígena Zapoteco, así como de la corriente democrática Red de la Unidad Nacional de la Izquierdas (RUNI-PRD), así como el propio FPR en su conjunto, continuamos con la ruta establecida por la Comisión Política del MRCP y la propia Asamblea General del Pueblo.
3.- En ese sentido, es importante señalar que las acusaciones respecto a una negociación a espaldas del médico son totalmente falsas e infundadas y antes al contrario, todas las mesas de diálogo contaron no solamente con el aval de la Comisión Política (la cual estuvo presente casi en su totalidad durante todas estas reuniones con el estado), sino también de la Asamblea General del Pueblo; aunque desafortunadamente el médico no siempre quiso estar presente o no siempre tuvo el interés de permanecer en estas reuniones por motivos de trabajo, según entendíamos por aquel entonces.
4.- Se debe mencionar, a su vez, que toda la discusión generada en las distintas mesas de diálogo, desde la primera hasta la última, fueron objeto de un minucioso proceso de análisis por parte de la Comisión Política del MRCP y de consulta ante la Asamblea General del Pueblo, sin menoscabo de la libertad de opinión, con voz y voto de todos los integrantes de este gran movimiento del cual orgullosamente formamos parte activa.
5.- Por desgracia, el juramento de Hipócrates que realizó el doctor Francisco Salud Bautista ante la comunidad médica que lo recibió como profesionista, no fue hecho ante el heroico pueblo blaseño; puesto que él decidió romper no solamente con el FPR (situación que pudiera ser respetable) sino con todo el Movimiento de Resistencia Civil Pacífica en su conjunto, al violentar el principio de la Asamblea General de todo el Pueblo, como máximo órgano de decisiones, que había dictado: ¡respaldar con la más amplia unidad la decisión soberana de la asamblea!
6.- Esta situación resulta evidente luego del resultado de las tres Asambleas Generales realizadas, donde la abrumadora mayoría argumentó y votó a favor de la referida integración, misma que fuera aprobada desde la primer Asamblea General de Consulta y que fue ratificada en presencia ya de los regidores y directores nombrados, para luego ser nuevamente respaldada por el pueblo en su tercera edición, donde ciertamente, el médico decidió su ruptura, junto con un reducido grupo de provocadores ajenos al movimiento y enteramente desacreditados por su lejanía y oportunismo histórico.
7.- A todo esto se debe precisar: ¿quién en realidad pretendía negociar a espaldas del pueblo? Durante todas las mesas de diálogo, la Comisión Política, acompañada de los representantes de cada comunidad, fijó una posición clara y contundente respecto al tema de la integración y la desaparición de poderes, sin aceptar nada hasta que la Asamblea General así lo determinará. Pero el médico fue hábil al plantear sobre la mesa el pago inmediato de su dieta como regidor, de la cual fue privado a fines del trienio anterior por mandato de Jaime Rito Gutiérrez y de la cacique
Agustina Acevedo Gutiérrez, aún a pesar de que este tema-así como el de los proyectos productivos que tenemos pendientes con el estado-no formaba parte de la mesa de diálogo, pues no era de interés inmediato del MRCP.
8.- Otro tanto al respecto puede decirse de la negociación individual sostenida por el galeno con la Coca Cola, puesto que si bien era un acuerdo del MRCP sostener un acuerdo con esta y otras empresas, no fue correcto que los resultados de esta negociación fueran privativos de un personaje, sino bajo el control directo y colectivo de la Comisión Política del MRCP, como lo fue en otros casos con otras empresas, bajo la interlocución y la administración directa de la Comisión Política.
9.- Es necesario aclarar que la renuncia del camarada Ricardo Gallegos Castro al cargo de concejal que le confería la ley electoral, no fue motivado por una aspiración individual de último momento, sino por una necesidad táctica del mismo MRCP para garantizar la conducción del proceso de movilización, con o sin espacios estatales. Recordando que el médico aspiraba a ocupar un espacio en el gobierno del estado el cual ahora pretende heredar a uno de sus esbirros, el cual carece de trayectoria política y formación ideológica.
10.- En cuanto al tema de la supuesta imposición de intereses personales por encima de los intereses del pueblo habría que preguntarse ¿quién es el pueblo? es decir: ¿el pueblo es un solo personaje o la gran masa de camaradas que han hecho posible con su estadía y su lucha, efectivamente brava, la vigencia de este movimiento histórico? No hace falta razonar demasiado para entender que los motivos de esta separación son el infantilismo de izquierda, el caudillismo y el oportunismo de siempre.
11.- Los argumentos para demostrar lo anterior pueden resumirse en:
a) La necedad para reconocer que la demanda de desaparición de poderes estaba condenada al fracaso (al igual que durante los últimos seis años) puesto que la mayoría PRIista y PANista en la cámara local ya la habían desechado desde el momento mismo de su solicitud, dado que el Gobierno del Estado y la LXI Legislatura Local habían declarado su entero respaldo al gobierno del Héctor Jiménez Osorio.
b) Que no bastaba con lanzar consignas ultra radicales como las que hoy utilizan los Anarco priistas para mantener la resistencia a toda costa, pues es bien sabido que la fraseología ultra radical ha sido y es un instrumento en manos de la reacción para confundir y aplastar al pueblo en lucha.
c) Que tanto la Comisión Política como la Asamblea General del Pueblo luego de mucho deliberar resolvieron la integración como una táctica para reagrupar y reorganizar nuestras fuerzas a fin de pasar a la ofensiva contra el caciquismo y más aún, contra el capitalismo, que es en esencia, el origen de los males que padece el pueblo trabajador.
d) Que la actitud asumida por el médico, en compañía de los provocadores de toda la vida, puede entenderse como una desviación política y más concretamente como infantilismo de izquierda al no entender que no toda resistencia contra la reacción es favorable para la revolución, sino solamente una resistencia consiente, organizada y disciplinada, cosa que los provocadores en todo momento se negaron en aceptar.
12.- De ahí se desprende el tema del caudillismo:
a) Es claro que siendo el entonces líder moral del MRCP, el médico pretendiera imponer su voluntad absoluta como en aquellos años en que carecíamos de formación político-ideológica o que no recurríamos al análisis colectivo.
b) La propia formación de la Comisión Política como órgano de dirección colectiva, siempre causo escozor en el ego personal del galeno, desacreditando las vacilaciones de los distintos camaradas y reprendiéndolos constantemente, negando la existencia de un proceso dialéctico de enseñanza-aprendizaje en la formación de cuadros.
c) Al acabarse el culto hacia su persona por parte del pueblo y exigir la presencia de todos los integrantes de la
Comisión Política en los distintos eventos, el médico comenzó a sentirse desplazado de un puesto que nadie pretendía arrebatarle y que al contrario, todos los integrantes de la Comisión Política seguíamos encumbrando erróneamente al reconocerlo como dirigente histórico del MRCP.
13.- En cuanto al oportunismo-que ha sido en todo momento un oportunismo de derecha, bien podríamos precisar:
a) El médico fue víctima una vez más, como en el 2005 y 2008, de las intrigas de los provocadores, quienes nunca han estado en los bloqueos, las marchas, los mítines, los enfrentamientos, los plantones, las guardias, etc. pero si en la confrontación interna y la ulterior división del movimiento.
b) Consideramos que el médico es culpable de este hecho por omisión y por permitir a esta gente-ajena por entero a nuestra lucha-tomar decisiones que no le competen y sobre todo, causar daños al MRCP como esta ruptura que hoy se da por parte de estos.
c) Desde la primer Asamblea General el pueblo mismo repudió y denunció a los provocadores como agentes al servicio de Huada Tina, señalándolos por nombres y apellidos, aunque hoy pretendan presentarse como los puros y más limpios luchadores sociales (sic!).
Con todo lo anterior y sin pretender hacer mella de la trayectoria que ha tenido el doctor Francisco Salud Bautista al frente del MRCP, enfatizamos que nuestro Movimiento y nuestras organizaciones sociales siguen unidas y más firmes que nunca en el objetivo de acumular fuerzas y perfeccionar nuestro sistema de organización unitario para enfrentar y derrotar en toda línea al caciquismo y los enemigos abiertos y encubiertos de nuestro pueblo, particularmente del anarco-priismo que pretende ser el salvador de las causas perdidas, generando confusión y división interna en nuestro movimiento, al pretender atraer a San Blas Atempa una disputa contra el FPR que personajes oscuros de organizaciones efectivamente gobiernistas, han desatado contra esta organización hermana que ha dado muestras de entereza, fidelidad y compromiso real con el pueblo de San Blas Atempa y de todo Oaxaca.
Nunca ha sido grato exhibir nuestras dificultades a la luz pública, pero considerando las declaraciones del médico-influido por los más oscuros y ajenos intereses políticos-le hacemos un enérgico llamado a la disciplina y la unidad, para que de manera inmediata reconozca su error y retome la lucha que estamos desarrollando y que muy pronto entrará a un nuevo periodo de movilizaciones por la impugnación de las elecciones amañadas en las agencias municipales, así como por los recursos económicos que corresponden constitucionalmente para cada una de estas.
Recalcamos; el médico no rompió solamente con el fpr, sino con todo el mrcp y aún está a tiempo de rectificar su conducta pues es de sabios reconocer nuestros errores y es característico de un buen dirigente, comprometido con los intereses del pueblo, el rectificar y retomar el trabajo de manera humilde en la trinchera que le asigne el movimiento.
Combativamente:
¡Solo el pueblo puede salvar al pueblo!
¡Que los trabajadores gobiernen la patria!
¡Ni caciques, ni caudillos!
¡Unidad, lucha y organización del pueblo entero!
Movimiento de resistencia civil pacífica de San Blas Atempa
Comisión política
San Blas Atempa, Oaxaca
Cuna de la resistencia civil, corazón de la esperanza revolucionaria