Avanza la rendición de cuentas como política de Estado: Colmenares
OAXACA, Oax. 8 de octubre de 2013 (Quadratín).- Reprobable en extremo es el caso de negligencia en la prestación del servicio médico e irresponsabilidad profesional que puso en riesgo la vida de la señora Irma López y su hijo en la Sierra Mazateca, por lo que debe haber una investigación exhaustiva de los hechos para fincar las responsabilidades administrativas y de cualquier tipo que hubiere.
Así lo expresó en entrevista el presidente de la Mesa Directiva de la LXI Legislatura estatal, Max Vargas Betanzos, quien al mismo tiempo externó su indignación ante el hecho, que no puede excusarse por los directivos del sector salud del Gobierno del Estado, diciendo simplemente que “Irma no siguió las indicaciones del personal médico”.
Al preguntársele su punto de vista en relación con el caso de la indígena mazateca del municipio de Jalapa de Díaz, quien el pasado miércoles 2 de octubre acudió al centro de salud de dicho municipio para recibir atención durante el trabajo de parto y al insistir por dos horas y ser negado el servicio tuvo que dar a luz en el patio del nosocomio, el legislador puntualizó:
“En éste ni en ningún otro caso cabe el argumento racista y discriminatorio de que la solicitante del servicio elemental a recibir asistencia médica para un parto “no hablaba español”, pues sobra en la región gente, Incluido el personal de la clínica, que habla los dos idiomas, el oficial y el de la región, sin embargo, en entrevistas radiofónicas se puede apreciar que no hay tal situación, pues el español de la paciente es perfectamente entendible”.
Dijo que es un caso típico de violación de los derechos humanos por lo que está muy bien que intervengan los organismos de la materia, en los ámbitos local y nacional, pero de parte del propio gobierno de Oaxaca debe haber una investigación seria, profunda y profesional para deslindar responsabilidades y evitar que casos dolorosos como éste vuelvan a ocurrir en el territorio del estado.
El líder del Congreso local también reprobó las acusaciones recíprocas entre las instituciones federales y estatales de salud, atribuyendo a otros la responsabilidad y excluyéndose de ella, pues “la salud es un derecho constitucional de los mexicanos, un derecho que el Estado mexicano debe tutelar y garantizar en la inmensa geografía de la República.
“Es importante investigar y aclarar los pormenores del caso de la Sierra Mazateca, y dar todo el apoyo moral, social y económico a Irma y a su familia, dijo el presidente del Congreso oaxaqueño, pero más importante aún es evitar que este grave caso de negligencia en la prestación del servicio médico vuelva a presentarse en cualquiera de las ocho regiones del estado.
“Que nunca más se discrimine a una oaxaqueña o a un oaxaqueño, sólo por su condición de pobreza o porque no hablan bien el español, mucho menos por instituciones del gobierno que están para servirles”, concluyó.