Seis años de impunidad: no hay #JusticiaParaSol
Oaxaca debe ser una realidad muy distinta si juntos le damos un rumbo diferente, si juntos planeamos nuevas definiciones que responsan de verdad a nuestras necesidades y aspiraciones, sin juntos asumimos renovadas actitutes fundadas en la honestidad, el respeto, la imaginación y el trabajo.
Si juntos nos decidimos a enaltecer nuestros sentimientos por la tierra que nos vio nacer y en la que vivimos con nuestros hijos.
Convencida de ello y de que contamos con la voluntad y fortalezas para lograr un presente y un futuro de estabilidad, paz y progreso, hago un firme llamado al compromiso y participación de todos los que quieren a Oaxaca y creen en ella para sumarse a una iniciativa de transformación y de superación. Una iniciativa que, con el concurso comprometido de mujeres y hombres; jóvenes y mayores; se convierta en la causa justa y digna de reivindicación social y de progreso.
Siempre he amado a Oaxaca y luchado por ello, porque me indigna la pobreza, la marginación, la desigualdad y la injusticia.
Toda mi vida he sido una inclaudicable luchadora social, que ha enarbolado con pasión y honestidad los reclamos de los oaxaqueños, en particular de los más necesitados y las exigencias de quienes demandan oportunidades para dar lo mejor de sí a Oaxaca.
Conozco nuestras fortalezas, capacidades y también nuestras carencias, valoro nuestro coraje para ir siempre hacia adelante. Me compromete la confianza que muchos oaxaqueños me han dado durante muchos años para apoyar sus luchas de reivindicación, para representarlos y defender sus intereses: en la lucha social, en el servicio público y en el Congreso de la Unión y para defenderlos de las injusticias en otras latitudes en el caso de los migrantes y sus familias.
Estoy segura de tener la capacidad y experiencias políticas, la emoción social, la pasión y coraje que se requieren para convocar a una reflexión y compromiso por Oaxaca.
Por ello con plena convicción, decisión y firmeza, afirmo:
Quiero ser Gobernadora de Oaxaca para conducir una misión de transformación y de prosperidad, un esfuerzo conjunto para ubicarnos en el nivel de bienestar que merecemos.
Quiero ser Gobernadora de Oaxaca para trasnformar las condiciones de pobreza, enfermedades, analfabetismo, desempleo y todo tipo de injusticias, en un haz de motivación y esfuerzo conjunto que lleve esperanza a todos los rincones de nuestra geografía.
Quiero ser Gobernadora de Oaxaca para entregarme sin descanso a la imperiosa tarea de obtener del Gobierno Federal los recursos y atenciones que históricamente le adeuda a nuestro estado.
Quiero ser Gobernadora de Oaxaca para hacer del desarrollo de nuestras regiones una realidad y no una simulación de programas y discursos. Para convertirlas en protagonistas y beneficiarias de sus riequezas y no en espectadoras saqueadas y engañadas.
Quiero ser Gobernadora de Oaxaca para hacer realidad la autonomía municipal, para convertir a la célula básica de nuestra organización político-admnistrativa en capital de solucionesw, en hálito que impulse el desarrollo del estado sin condicionamientos que anclen su pleno derecho.
Quiero ser Gobernadora de Oaxaca porque quiero hacer latir con todas sus fuerzas los muchos corazones que tiene nuestra entidad en sus comunidades, en esos bastiones de vida y de lucha que mantienen incólumes nuestras esencias, nuestra cultura, nuestros valores y nuestras aspiraciones de ser mejores.
Quiero ser Gobernadora de Oaxaca porque deseo hacer realidad una democracia que vaya más allá de los procesos político-electorales, que se haga presente en la participación social dentro de la administración pública y en la búsqueda de una verdadera justicia, que no es posible sin una democracia plena.
Quiero ser Gobernadora de Oaxaca porque estoy preparada para ello. Porque mi motivación surge de un ineludible compromiso político y social, porque no tengo la menor duda de que estamos ante la oportunidad histórica de transformación que siempre hemos esperado. Porque he revisado con mi corazón, con mi razón y con mi conciencia una decisión de vida y he llegado a la conclusión de que este es el momento en que juntos construyamos el Oaxaca que anhelamos.
Convoco a todos los oaxaqueños a esta reflexión y compromiso, sin distingos ni exclusiones, mucho menos discriminaciones ni perjuicios. En ella hay únicamente la certeza de que no podemos seguir así y que hoy está en nuestras manos una mejor realidad para todos, si luchamos
JUNTOS POR OAXACA.