Isidoro Yescas / Árbitro bajo sospecha

19 de noviembre de 2009

1:27

Isidoro Yescas

Oaxaca, Oax.19 de noviembre de 2009 (Quadratín).- Dos aspectos torales de todo proceso electoral son el uso y destino de los recursos públicos y el padrón electoral y su correspondiente listado nominal.
Por eso mismo durante la primera sesión del Consejo General del Instituto Estatal Electoral el representante del PAN, Dagoberto Carreño, exigió la inmediata intervención del órgano electoral para sancionar los actos anticipados de precampaña de algunos funcionarios públicos del gobierno del estado y el desvío y derroche de recursos públicos que para tal fin se están utilizando.
Pero no menos importante para garantizar un proceso imparcial y apegado a los principios de certeza jurídica y objetividad es la actualización y verificación del padrón electoral, pues del mismo se genera la lista nominal de electores, es decir, la relación de ciudadanos con credencial de elector que podrán sufragar en las elecciones concurrentes del 2010 en la entidad.
De tan importante y delicada tarea se encarga, por ley, el Registro Federal de Electores del Instituto Federal Electoral, pero para el caso del padrón de las entidades federativas debe mediar un convenio de colaboración con los gobiernos estatales.
En lo que hace a Oaxaca el documento en el que se ha basado el IFE para suscribir convenios con el órgano electoral estatal es el fechado en mayo de 1997, pues desde entonces los titulares del poder ejecutivo estatal no han procurado revisar y actualizar los términos del citado convenio institucional.
Pues bien, en base a éste convenio el IFE, tanto a nivel central como por conducto de la Junta Local Ejecutiva, ha insistido en la necesidad de hacer valer las disposiciones legales en la materia para revisar, actualizar y verificar el padrón electoral del estado de Oaxaca y de esa manera garantizar un padrón depurado y confiable y, en consecuencia, listados nominales sin nombres de personas fallecidas y credenciales duplicadas.
En síntesis con listas en donde aparezcan todos los ciudadanos en edad de votar que ya cuenten con su credencial de elector y en donde también se excluyan a aquellos que ya fallecieron y se depuren a los llamados ciudadanos duplicados.
De acuerdo al texto del posicionamiento que sobre tema expuso hace poco en la tribuna del Congreso local el diputado del PRD, Wilfredo Vásquez López, para que en las elecciones del 2010 se pueda contar con las listas nominales de electores definitivos con fotografía deben aplicarse los siguientes programas en un plazo no mayor de 5 meses:
* Publicar la convocatoria para insacular a los ciudadanos del estado de Oaxaca.
* Instrumentar el programa de actualización del padrón electoral.
* Instrumentar el programa de bajas al padrón electoral.
* Aplicar el programa de detección de ciudadanos duplicados en el estado, municipios y secciones electorales colindantes.
* Aplicar el programa de verificación del padrón electoral a nivel institucional y por parte de los partidos políticos.
* Publicar y exhibir en lugares públicos las listas de exhibición.
* Entregar al Instituto Estatal Electoral las listas definitivas de electores con fotografía.
Esta propuesta, acompañada de sus anexos técnicos y financiero, fueron entregados al presidente del Consejo General del IEE, José Luis Echeverría, desde el mes de agosto de este año en la intención de que, de aprobarse y suscribirse el convenio específico correspondiente, pudiera aplicarse una vez iniciado el proceso electoral.
Sin embargo, extrañamente Echeverría primero dejó correr el tiempo sin ofrecer una respuesta oficial al IFE y luego, tal como lo denunció en tribuna el diputado Vásquez López, aceptó el ofrecimiento a cambio de que solamente se apliquen los programas relacionados con la exhibición de las listas nominales y la entrega de las listas definitivas.
El costo estimado para la aplicación de todo el proyecto asciende a 7 millones 500 mil pesos. Reducido solamente a dos programas el costo se reduce a poco más de un millón de pesos.
Al proponer y comprometerse suscribir con el IFE un convenio reducido solamente a dos programas, Echeverría ha optado por la vía mas cómoda en términos económicos pero también políticos. No gasta en donde debiera gastar aunque esté de por medio la autenticidad y efectividad del sufragio (artículo 79 del CIPPEO) y el órgano electoral esté obligado a asegurar el ejercicio de los derechos político-electorales de todos los ciudadanos. Pero también queda bien con el partido con el que jugó en el 2004 y con el que, por lo visto, vuelve a apostar ahora aun cuando pretenda vestirse de imparcial y respetuoso de la legalidad.
La gran debilidad de elaborar las listas nominales definitivas sin proceder previamente a una nueva insaculación, generar las bajas por defunción y detectar otro tipo de inconsistencias del padrón vigente hasta ahora, es que de un padrón integrado por 2 millones 661 mil 721 ciudadanos, el 20 por ciento (mas o menos 500 mil ) observa incosistencias, según lo expresado y sustentado por el diputado del PRD en la sesión del 12 de noviembre del Congreso local. De ser cierto, la cifra de 40 mil ciudadanos fallecidos y que aún no han sido dados de baja, también resulta preocupante.
¿Cómo se elaborarán, entonces, las listas definitivas en los términos propuestos, y aún no convenidos jurídicamente, entre el IEE y el IFE-RFE? Fundamentalmente con la base de datos del padrón del 2009 que, entre otras cosas, significará que si los partidos políticos de oposición no reaccionan a tiempo para las elecciones del 2010 tendrán a los mismos funcionarios de casilla de la pasada elección federal y listados nominales con serias inconsistencias.
El protagonismo, desconocimiento de la materia y hasta ingenuidad de la mayoría de los representantes partidistas y parlamentarios de oposición acreditados ante el Consejo General del IEE, y los mismos tropiezos que hasta ahora vienen enfrentando las dirigencias partidistas para consolidar su proyecto de coalición electoral, no les han permitido darse cuenta que asuntos como la actualización del padrón electoral, la entrega de listados nominales definitivos confiables, o la integración de los consejos municipales y distritales, y el mismo manejo y destino del presupuesto del órgano electoral, son mucho más importantes para garantizar una contienda imparcial, equitativa y libre de sospechas de fraude que perder el tiempo en reglamentos que luego se incumplen o en reclamos de lo que pudo ser y no fue como ocurrió en la primera sesión del Consejo General del IEE.
Y el tiempo apremia.