
Elección judicial: Entre la degradación y la plenitud democrática
Faltan 91 días para la inauguración de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
México, DF. 27 de abril del 2012 (Quadratín).- Hasta este jueves, la delegación mexicana tenía asegurados 62 lugares olímpicos, de los 100 que estimó la Conade, y que superarían los 85 que participaron en Pekín 2008.
Justo en China, México sólo consiguió tres medallas; dos de oro, con Guillermo Pérez y María del Rosario Espinoza en taekwondo y una de bronce, con Paola Espinosa y Tatiana Ortiz en clavados sincronizados.
Cuato años después, de estos medallistas, sólo Paola y María del Rosario, clasificaron en sus respectivas disciplinas, y son quienes más suenan para subir al podio en Londres.
Quien también parece llegar en buen momento es la selección de futbol varonil, que será cabeza de serie del Grupo B. Enfrentará a Corea del Sur, Gabón y Suiza en la primera ronda.
Y es que después del grato sabor de boca que dejó la participación y organización- de los Juegos Panamericanos de Guadalajara, en octubre pasado, y donde se ganaron 133 medallas en total (42 / 41 / 50), las expectativas en la delegación mexicana se vuelven aún mayores.
Sin embargo, no sé si compartir la opinión que hace una semana dio el director de la Conade, Bernardo de la Garza, quien pronosticó que los deportistas mexicanos llegarán por lo menos a 20 fases finales, aunque no habló de un mínimo de medallas a ganar.
¿Qué tan positivo se vuelve pronosticar triunfos o augurios deportivos en una sociedad como la mexicana, que justo por esas fechas, estará despertando de una casi garantizada cruda poselectoral?
El propio De la Garza calificaba a México como un país de 2.7 medallas promedio por Juegos Olímpicos. Declaraba también que en lo que va de este ciclo, la Conade ha invertido 2 millones 800 mil pesos. ¿Qué significa esto? ¿Que en promedio, cada medalla, de cualquier color, costaría casi un millón de pesos? ¿Es lo que México merece? ¿Es para los que rinde el talento deportivo nacional?. Entonces, ¿dónde queda o dónde falta la inversión para el alto rendimiento deportivo?
Mientras las respuestas se contestan solas, habrá que soñar de nuevo con pronósticos reservados el próximo verano. Hasta entonces.
@jesusbahena