José Julio Antonio Aquino / Fundamentos / Crezcamos juntos

OAXACA, Oax. 18 de septiembre de 2014 (Quadratín).- Se ha anunciado por el Ejecutivo Federal que, en “la miscelánea fiscal del próximo año no habrá nuevos impuestos ni incremento a los ya existentes”. Esto lo afirmó el Titular de la Secretaría de Hacienda del Poder Ejecutivo Federal. Ahora, se dio a conocer que a través del Programa “Crezcamos Juntos” se brindan incentivos fiscales a los contribuyentes del Régimen de Incorporación Fiscal (IF), esto en “beneficio de los micro y pequeños empresarios”.

El objetivo de este programa es, ser “una estrategia en la que las instituciones del Gobierno de la República armonizan sus programas para hacer atractiva la transición a la formalidad”. Es decir, se pretende desde este esquema que el comercio informal, deje de serlo, para transitar a lo “formal”, entendiéndose por esto que se vuelva “contribuyente” y expida sus comprobantes de movimientos financieros.

Esta visión miope de todos los Gobiernos de buscar fórmulas para lograr fondos vía impuestos, es insultante. Por un lado aseguran no habrá incrementos ni nuevos impuestos, pero por otro, la estrategia es agotar todo recurso para que la clase que sostiene al país con el pago del Impuesto al Valor Agregado (IVA), lo siga haciendo; ahora a través del sistema de “Incorporación Fiscal”.

La razón de decir que no habrá nuevos impuestos, ni incrementos es para tener argumentos en la guerra mediática que habrá de enfrentar el Gobierno Federal y su partido ante la cercanía del proceso electoral 2015 y ante la reacción que la ciudadanía está demostrando a la perpetración del robo nacional, llamado Reforma Energética. Porque aún con la corrupción y los datos de que PEMEX es una empresa en proceso de quiebra y que por esa, entre otras razones, había que privatizar la paraestatal, la pregunta es ¿Cómo le vamos a hacer con los recursos que se dejarán de percibir, si ahora habremos de compartir los ingresos que los recursos petroleros generan? La respuesta se llama Régimen de Incorporación Fiscal.

La tarea es captar impuestos y ya empezó, los medios de comunicación, difunden en spots los logros de este Programa; la Secretaria de Hacienda dedica esfuerzos mayúsculos a convencer a todos aquellos mexicanos que tienen un pequeño negocio en la colonia, el barrio, en la esquina a que se inscriban en este régimen; argumentan que ellos no pagan impuestos, que ahora que los paguen, serán beneficiarios de incentivos y sujetos de crédito para poder impulsar sus “empresas”.

Es menester recordar a todos que, si alguien paga impuestos en este país, éstos son los consumidores finales, que somos todos y todas quienes vivimos en México. Porque el IVA, es un gravamen que se agrega al costo de todo lo que se consume, es decir, si usted compra un lápiz, en el costo de este, quien se lo vende ha agregado el 16 por ciento del valor de su costo que es el IVA. Si usted compra, gasolina, al costo del combustible se le ha agregado también el porcentaje de impuesto y, así todo lo que es objeto de comercio en México, está gravado con ese impuesto.

Aún podemos sostener, como lo hace la Secretaría de Hacienda que, en México usted que tiene un pequeño comercio, no paga impuestos, o lo que es peor, (porque así lo ven, los funcionarios de la Secretaría de Hacienda) usted es un Evasor de Impuestos y por su culpa, no hay recursos públicos para que el Estado Mexicano, trabaje para sus gobernados.

Así las cosas, ahora con la Reforma Energética y al compartir el producto que esta empresa genera, será la población quien nuevamente cargue con la pesada loza de aportar recursos para sostener la economía del país, a través, claro está de los impuestos. Análisis con Fundamentos.