Dos meses de huelga, miles de asuntos pendientes
Análisis a Fondo
MÉXICO, DF, 19 de noviembre de 2015.- Le sacó al bulto Virgilio Andrade, el contralor nombrado por Peña Nieto como secretario de la Función Pública para que los “investigara” por si había “conflicto de intereses” en el manejo del negocio de la “casa blanca”. El empleado investigador y juez debió de comparecer sólo ante comisiones y no ante el pleno de la Cámara de Diputados.
En el pleno lo harían papilla los representantes de la izquierda jodona del Movimiento de Regeneración Nacional de López Obrador por lo menos. Quizá uno que otro perredista y algunos del Movimiento Ciudadano. Tal vez alguno del PAN.
Qué tristeza que en este país la simulación sea filosofía de vida en las relaciones interpersonales y en las del poder político, el económico, los medios de información y las clases desvalidas. La propaganda es burda. Pero se la cree la clase política. Es la actitud del avestruz, que pretende ocultar la realidad cruda enterrando la cabeza.
Es el cuento de nunca acabar. Los políticos se encumbran gracias a la corrupción en todos los estratos de la vida política y económica, y de justicia. Y aunque nadie les crea, ellos entierran la cabeza en verdades sui generis, como por ejemplo esa de que la casa de las lomas, que costó unos 80 y tantos millones de pesos la compró la señora del presidente, cuando a todas luces es imposible que con lo que hubiera ganado como actriz de medio pelo gastar tanto dinero en una casa.
De dónde salió la casita, que dijo la propia señora Peña Nieto que iba a ser vendida. Obviamente que fue regalo de la empresa que recibió tantos multimillonarios favores desde el gobierno del estado de México, y desde las instancias federales en los tres años que han pasado de la administración federal actual.
Hubiera sido mejor decir la verdad y no exponerse a que la mancha fétida quedara permanentemente en la hoja de vida del propio primer mandatario de la nación. Y ahora, pues no habrá quien le haga preguntas incómodas al señor Andrade. Cómo es eso de que el propio empleado del presidente sea comisionado por el propio presidente para que investigue al propio presidente y concluya que el mismo presidente está libre de responsabilidades y de culpa.
Esto solo ocurre en un país como México, en donde los políticos tienen la habilidad de tapar el sol con un dedo y en donde nadie le cree a los políticos, pero estos hacen como que engañan a la gente. Bueno. Todo un galimatías emocional. Es una comedia de las equivocaciones, una pieza teatral de las simulaciones. Yo simulo, tú simulas, nosotros simulamos, ellos simulan… y etcétera. Los únicos que nunca simulan son los pobres muertos de hambre, que en su vida verán una casita de 20 metros cuadrados para vivir ellos y sus hijitos.
Pero bueno. Así son las cosas de enredadas y de simples en México, en donde todo es subrrealista. Hasta las casitas que construye el INFONAVIT para engañar a los trabajadores y cobrarles mes a mes una millonada por un lugarcito donde vayan a dormir después de las prolongadas horas de trabajo. Porque para eso sólo sirven. Para pasar la noche. Jamás se podrá en uno de esos cuchitriles, que no son ni la portería de la casa blanca, organizar una fiestecita digna de seres humanos.
Pero bueno, Al fin compareció el señor Andrade ante los diputados, lo que constituyó otro acto de simulación.