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Oaxaca, Oax. 20 de diciembre de 2010 (Quadratín).- El coordinador de la bancada perredista en el Congreso de Oaxaca, Carol Antonio Altamirano, consideró que la Mesa política instalada para revisar la integración de los ayuntamientos debe tener como límite la legalidad.
Esta mesa no puede de ninguna manera vulnerar la voluntad popular ni convertirse en una impostora de la voluntad popular, es bueno construir acuerdos mediante el diálogo pero nunca violando la ley ni lo expresado en las urnas, comentó.
Entrevistado al término de la instalación de la Mesa Política entre gobierno, diputados y partidos políticos, consideró que es una buena señal la atención a los ayuntamientos para anticipar conflictos que pudieran dañar el tejido social en las comunidades.
La instalación de esta mesa es ir al encuentro de los problemas, nosotros lo saludamos, pero hay que precisar que no será con base en el chantaje que se efectúe la integración, sino por la vía del diálogo, reiteró.
Lamentó la ausencia del Partido Revolucionario Institucional (PRI), por ser una fuerza política importante en la entidad, y consideró que su postura tendría que sumar a la construcción de acuerdos y no convertirse en una oposición que dificulte el diálogo.
Ninguna fuerza política debe tener pretexto alguno para entrarle a la mesa, porque aquí hay una apuesta por la institucionalidad y la gobernabilidad, en la que debe privilegiarse el diálogo con sensatez para romper las inercias al cambio democrático, comentó.
También dijo que es una oportunidad para lograr acuerdos claros, nada de reuniones en lo oscurito ni acuerdos debajo de la mesa, todos los actores políticos deberían estar en esta mesa, cuyo único límite debe ser la legalidad y el respeto por la voluntad popular.