Llevan ingreso a las familias pobres las microempresas apoyadas por Sedesol

México, DF. 34de diciembre de 2012 (Quadratín).-Para contribuir al desarrollo de capacidades y llevar ingresos a los habitantes de comunidades de alta y muy alta marginación, la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), a través del Programa Opciones Productivas, ha impulsado desde 2007 más de 35 mil microempresas, en beneficio de medio millón de personas.
El Programa ha puesto especial énfasis en cuatro sectores económicos: 47.7 por ciento de los proyectos corresponden a agricultura, ganadería, aprovechamiento forestal, pesca y caza; 23.4 por ciento, a industrias manufactureras; 15.9 por ciento, al comercio al menudeo, y 4 por ciento a servicios de alojamiento temporal y de preparación de alimentos y bebidas, entre otros.
Desde su surgimiento en 2003, el Programa ha tenido un enfoque integral, ya que considera el apoyo económico para la realización de actividades productivas y reconoce la importancia de la capitalización de los productores, planteando la recuperación de las inversiones.
En 2012 el programa ha apoyado 2 mil 911 proyectos productivos, todos ellos creados con el propósito de llevar bienestar a las comunidades de alta y muy alta marginación.
El programa de la Sedesol brinda alternativas de empleo y mejores ingresos, pero también ha servido para empoderar a la mujer como protagonista de las principales transformaciones en las comunidades rurales de los diferentes estados de la República Mexicana.
“La participación de las mujeres en proyectos productivos es importante, no sólo en bordados y tejidos, como sucedía tradicionalmente, sino también en granjas de ovinos, invernaderos y nuevos cultivos, lo que demuestra la gran apertura del Programa”, según establece la Evaluación Complementaria de Resultados del Programa de Opciones Productivas en 2010.
Los proyectos presentados promueven la participación ciudadana en proyectos sustentables, que hacen posible cuidar el medio ambiente y, al mismo tiempo, contribuyen a la superación de la pobreza en el país.
Un ejemplo del impacto del Programa Opciones Productivas se encuentra en el pueblo de Husichi, municipio de Toliman, en la zona sur de Jalisco, una comunidad de 383 habitantes que han cultivado tradicionalmente maíz, frijol, chile, jitomate y sorgo. Recientemente se encontró en la pitahaya una alternativa para obtener ingresos adicionales y mejorar la economía de sus habitantes.
De acuerdo al Presidente de la Cooperativa “Productores de Huisichi”, Asunción Sánchez, la Sedesol los apoyó para el acondicionamiento de acopio y procesamiento de la pitahaya, además de adquirir una camioneta con caja refrigerante, computadora y cámara digital.
La temporada de producción de la pitahaya comienza entre marzo y abril y finaliza en julio, lo que representa 90 días de corte por temporada, donde se cosechan 200 toneladas, de las que se extraen 700 kilos de pulpa, con una ganancia aproximada de 427 mil 500 pesos, que se distribuyen entre 57 socios, por lo que a cada uno le corresponden 7 mil 500 pesos de ganancia.
En el centro de acopio se recibe el producto, se despulpa y se guarda en la cámara fría, para trasladarlo a Guadalajara donde se procesa y envasa como mermelada. Cuando no se cosecha pitahaya se despulpa tamarindo, que también se envía a la capital jalisciense.
“La pitahaya ofrece mayor rendimiento que el cultivo de maíz o de frijol” dice Francisco González, tesorero de la Cooperativa, al precisar que lo importante es generar empleo, que en el caso del tamarindo beneficia directamente a 500 personas, incluidas mujeres, quienes cosechan el tamarindo en terrenos ejidales.
José Alberto Cabello, enlace de la Cooperativa, señala que luego de cinco años de trabajo, la mermelada de pitahaya ha comenzado a penetrar los mercados de Jalisco, Colima y Chiapas, y se tiene programada su entrada a una cadena de tiendas, con un pedido de 2 mil 400 frascos, a fin de conocer la aceptación entre el consumidor de la región.