Quien está en desacato es la jueza, dice Sheinbaum sobre reforma judicial
Oaxaca, Oax. 13 de enero de 2010 (Quadratín).- En los días recientes se han dado pasos muy importantes para aprobar y registrar una coalición opositora, pero la lucha del pueblo de Oaxaca trasciende la coyuntura del mero acto electoral, pues las voluntades de muchos no sólo buscan la alternancia sino una verdadera transición democrática, afirmó el senador con licencia, Gabino Cué Monteagudo en una entrevista radiofónica, realizada en la ciudad de México.
En conversación con Gustavo Rentería, anticipó que el ánimo existente en pueblos y comunidades de los 570 municipios es que se quiere hacer historia en un año de gran simbolismo para todo el pueblo mexicano por la conmemoración de 200 y 100 años de libertad, Independencia y Revolución.
El objetivo, por lo que he podido percibir, destacó el político oaxaqueño, es la integración de un primer gobierno plural que conduzca a la entidad por la senda del bienestar y la paz. Oaxaca ya no quiere más confrontación ni autoritarismo y corrupción del gobierno; Oaxaca quiere un cambio de estilo y la forma de hacer las cosas; la entidad quiere oportunidades para el progreso, seguridad para la inversión y enfrentar por la vía del diálogo y la conciliación los graves problemas sociales y del desarrollo causantes del atraso y la marginación.
A pregunta expresa Gabino respondió que no se trata solamente de sacar un partido político o a una persona por otra: La idea que nos justifica es la intención de tener un programa común que nos permita un proceso de transición pacífico en Oaxaca.
Al respecto precisó que de manera pública ya presentó para que lo tomen en cuenta las fuerzas políticas que integran la coalición opositora, 17 Compromisos Mínimos de un Nuevo Pacto Social, que traza líneas generales de los cambios institucionales que deben de hacerse desde el Congreso, así como las prácticas y estilos que deben de asumirse desde el gobierno.
Entre ellas destaca el inicio -a partir del triunfo de esta opción- de un proceso de planeación participativa para que con la concurrencia de los diversos sectores se formalice un plan no de corto plazo a seis años, sino del 2010 al año 2030.
Esto con el propósito de que con un plan de gobierno de mediano y largo plazo, y con la concurrencia de todos, pueda tener éxito un cogobierno
¿Qué significa esto? Que se abran los espacios para que se analicen e incorporen propuestas de los partidos, la sociedad civil, las organizaciones sociales, la sociedad entera, que le permitan dar viabilidad a este proyecto.
Para el legislador con licencia a Oaxaca le ha costado muy caro el que se hayan tomado decisiones a espaldas del pueblo y existan agravios que deben castigarse.
Sin embargo, se dijo convencido de que para que el progreso y la paz vuelvan a la entidad la sociedad debe participar en la conducción de una ruta distinta que asegure la gobernabilidad y los cambios de fondo que la gente ha reclamado para vivir mejor.