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Almuzara Libros México, presente en la FIL de Palacio de Minería
Oaxaca, Oax. 28 de junio de 2011 (Quadratín).- La música está de luto. Don Héctor Martell, compositor oaxaqueño que alcanzó el renombre por sus canciones interpretadas en diversas voces, dejó de existir esta tarde. Sus honras fúnebres se desarrollarán en la funeraria Núñez Banuet, donde familiares y amigos despedirán su cuerpo.
A su partida física, deja un gran legado artístico, pues sus canciones forman parte del repertorio que todo México ha escuchado. Amor añejo, La bruja, Como de treinta, entre cientos de composiciones que han coreado los enamorados.
En este año, el Ayuntamiento de la ciudad organizó un homenaje en vida al compositor, con la presencia de Armando Manzanero y Martín Urieta, quienes reconocieron la aportación del oaxaqueño.
Con más de 70 años, los restos del artista oaxaqueño serán despedidos en la capilla Imperial de la Agencia Núñez Banuet. Descanse en paz el artista, el hombre sencillo que con su guitarra y su voz alegró los corazones.
Como un pequeño homenaje, aquí una de sus canciones por las que alcanzó la fama:
Amor añejo / Héctor Martell
Sobre mi sienes
brilla la escarcha que deja el tiempo
y de la vida tengo un montón de conocimientos
pero vengo a pedir, un poquito de amor
porque puedo quererte como un señor.
Dale a mi vida la inmensa dicha de tu presencia
para ofrecerte noches y días con mi experiencia
pues me sobra valor y te confieso ahora
que sabré hacer de ti la gran señora
Sé que junto a mí tú eres muy joven
sé que en realidad yo soy más viejo
pero te puedo amar, cuanto tu quieras
Para hacerte feliz con este amor añejo.
Sólo te pido que seas conmigo leal y sincera
y así por siempre serás mi amante y compañera
sólo tienes que ser una buena mujer
y aquí conmigo ni amor ni nada te faltará.