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Oaxaca, Oax. 5 de septiembre 2012 (Quadratín).-La actitud del diputado local Francisco Martínez Neri, al no reconocer que en la democracia se gana y se pierde, deja al descubierto que es un improvisado y aprovechado en la política, que no conoce de esta práctica y se deja llevar por lo que los demás opinan. No tiene oficio político, mucho menos compromiso con un partido.
Así lo señaló tajante el secretario general en Oaxaca de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP), Jorge Toledo Luis, quien en entrevista afirmó que es sano que el ex rector de la UABJO reconozca que su partido involuciona y retoma las prácticas del pasado, las que mi partido ha ido desechando, el nuevo PRD ha hecho una reedición del viejo PRI, el que ya no existe para nosotros.
En este sentido, Toledo Luis afirmó que Martínez Neri sólo actúan en consecuencia con lo que escucha, pero no tiene sentido común y práctica en las cuestiones políticas, se pasó cuatro años como rector de la universidad de los oaxaqueños, dándole un rumbo equivocado a nuestra máxima casa de estudios.
La prueba está, dijo, en que el diputado perredista se niegue a reconocer las reglas más elementales de la democracia representativa, de la que él en lo personal es legítimo usufructuario, la principal de ellas es que en la competencia electoral se gana y se pierde, y no es culpa de los órganos electorales, quienes sólo sancionan la legalidad de las contiendas, no definen el fiel de la balanza.
Enfatizó que no es ético ni congruente que con un discurso hueco y vacío, se trate de descalificar la elección presidencial y al mismo tiempo conceder legitimidad a la elección, el mismo día, en que 10 de sus compañeros de partido ganaron las diputaciones de mayoría en Oaxaca y dos de sus correligionarios ya ejercen funciones en el senado de la República.
Para el dirigente de la CNOP, es desmesurado e infundado hablar de que Enrique Peña Nieto es producto de un fraude, cuando más de dos millones de ciudadanos, entre representantes del IFE y representantes de los partidos, vigilaron la legalidad y limpieza del proceso en todo el país y cuando tanto el IFE como el TEPJF desecharon los recursos interpuestos, éste último por unanimidad.
Decir que en la elección presidencial hubo fraude por compra de votos es ver la paja en el ojo ajeno sin reconocer la viga que se tiene en el propio, pues todo mundo sabe del operativo descomunal montado en Oaxaca en apoyo a los candidatos perredistas con recursos públicos y el abierto respaldo del Gobierno del Estado.
Finalmente, lamentó que un personaje con la formación y el profesionalismo del diputado Francisco Martínez Neri se haya dejado dominar por el espíritu de partido, hasta perder toda objetividad en el balance de la elección del primero de julio, donde su organización política tuvo un importante repunte y así, como en unos lugares ganó en otros perdió, como corresponde a toda democracia representativa.