Convocan a capacitarse en combate a la corrupción a nivel municipal
OAXACA, Oax. 4 de enero de 2014 (Quadratín).- A realizar una actividad legislativa más eficiente y de atención a las demandas de la sociedad, convocó el senador del PRD Benjamín Robles Montoya al Senado de la República, luego de los escandalosos gastos que se dieron a conocer en la llamada Cámara Alta como consecuencia de las manifestaciones sociales durante la aprobación de las reformas educativa y energética.
En ese sentido, el representante por Oaxaca, uno de los estados más pobres del país, dijo que es necesario que los responsables de las instituciones, de cualquier orden de gobierno, deben ser sensible y atender con oportunidad las necesidades del pueblo.
“El problema que tenemos es que la gente desconfía profundamente del Senado. Y además, está molesta por una gran cantidad de actos legislativos que la han agraviado, como el caso emblemático de la Reforma Energética. Así que la única forma de prevenir manifestaciones y gastos adicionales, es escuchando previamente las peticiones de los ciudadanos y consultando al pueblo sobre las decisiones que se toman en la más alta tribuna del país”, consideró.
En un informe del Senado, dado a conocer en diversos medios de comunicación el viernes pasado, indica que por concepto de alimentos y otros servicios relacionados erogó 5.8 millones de pesos solo en el último cuatrimestre del año 2013, cuestión necesaria –justifica- debido al grado de tensión generado por el debate de diversas reformas legislativas, que obligó al uso de sedes alternas y extenuantes jornadas de trabajo.
“El problema de fondo en el país es la desigualdad. Por eso, las instituciones deben conducirse con austeridad pero con eficiencia, utilizando más la inteligencia que la vanidad”, aseguró el legislador perredista.
Robles Montoya afirmó que el Senado debe ser ejemplo, pero sobre todo reflejo de una sociedad que no vive en la opulencia sino en la restricción continua.
“Los Senadores debemos defender a toda costa un alto grado de identificación con las necesidades de la gente y su modo de vida. De otra manera, se establece una diferencia muy riesgosa que no es correcta, ni útil, ni republicana”, asentó.
Por lo que, el congresista federal demandó seriedad y congruencia no sólo en el Senado sino en todas y cada de las instancias públicas de los tres niveles de gobierno, para conducirse con decoro y respeto en el ejercicio del gasto pues, dijo, el dinero de las instituciones no es privado o personal, sino producto de los impuestos y recursos de las y los ciudadanos.
“El malgasto o despilfarro de los recursos públicos produce una profunda decepción entre la gente, deja de creer en el gobierno y ello produce apatía o coraje. Y esas actitudes son precisamente las que deben erradicarse en México, pues cruzamos por una crisis social inédita”, sentenció el senador oaxaqueño.