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Oaxaca, Oax. 3 de julio de 2010 (Quadratín).- Oaxaca celebra hoy un gran día. Una fecha para que cada ciudadano asuma la responsabilidad que le corresponde con su comunidad y participe en la construcción de instituciones más sólidas, para fortalecer con su voto el derecho que le da esta patria y elegir libremente al gobierno que anhela en los próximos años.
Este domingo Oaxaca tendrá 4 mil 869 casillas para sufragar. Cada una de ellas distribuidas entre los 570 municipios del estado. Sin duda, una ardua labor para las mujeres y hombres que fungirán como funcionarios de esta elección, pues sobre ellos transita la mayor de las responsabilidades para que esta tierra pueda dar un ejemplo de civilidad y democracia, a los ojos de un país que lo estará observando con atención.
Un proceso en el que se encuentran registrados 2 millones 571 mil 569 electores, donde el 46.82 por ciento son varones, frente a un 53.18 por ciento mujeres. Históricamente, siempre las mujeres han sido mayoría en este país y esencialmente ésta vez, serán ellas quienes definan una competencia electoral que pone sobre la mesa la posibilidad histórica de que la transición hacia la democracia se concrete en Oaxaca.
El rango de edad mayoritario en la entidad son los jóvenes precisamente. El porcentaje de ellos entre 18 y 30 años componen el 27.77 por ciento del padrón electoral. En números redondos estamos hablando de 690 mil 654 mujeres y hombres, que representan el número suficiente para que cualquiera de los candidatos contrincantes pudiera ganar esta elección, si todos ellos votaran a favor de alguno.
No cabe duda, somos una tierra donde la juventud tendrá la responsabilidad con Oaxaca de integrar el gobierno que anhela para los próximos años. La mayoría de las demandas que se registraron por parte de las casas encuestadoras durante este proceso electoral, tenían que ver precisamente con el sentir que hoy aqueja a la gran mayoría de los menores de 30 años, que se refieren a la falta de empleos.
No cabe duda, ellos son la fuerza que moverá a Oaxaca en los próximos años, la energía para hacer frente y sacar adelante los graves rezagos de nuestra tierra. Y con ellos habremos de celebrar los avances de los que menos tienen para devolverle el orgullo perdido a esta tierra frente al resto del país.
Esta elección no será como las anteriores, ahora será mucho más competida que hace seis años. En este proceso concurrente se encuentra la renovación del cargo de gobernador del estado, 25 diputados locales y 152 presidentes municipales (por el principio de partidos políticos), lo que siempre genera una mayor disposición por participar.
Pero no sólo eso hace distinto a este proceso. La reforma electoral federal del 2007 motiva a que en la boleta electoral pueda aparecer cada partido político con su propio logotipo. Esto sin duda representa un gran avance para la transparencia y la vida democrática. Pues permite conservar la identidad partidista de los electores y exhibe el número real de votos con que cada partido cuenta.
Los priistas que no desean votar por el partido verde ecologista lo podrán hacer votando por el PRI. Igualmente los panistas que no ven con buenos ojos a los del PT. Cada simpatizante es libre, por ley, de votar por el partido y candidato que cumpla con sus exigencias. Así es la democracia en México, y que hoy en día estrena sus reglas para Oaxaca.
Sobresale para este proceso electoral el importante despliegue que tendrá la prensa nacional e internacional en su cobertura. Han llegado corresponsales de los principales medios nacionales como Televisa, Tv Azteca, Reforma, El Universal, Milenio, Excélsior, entre otros; mientras que de Estados Unidos están el NY Times, LA Times, AP, Univision, CNN; de Europa la agencia EFE, AFP, Le Monde; y de Latino América, el diario Prensa Latina. Seguramente habrá más, que no han sido registrados.
La misión de observadores electorales ésta vez resulta por demás significativa, pues ha hecho de la elección una de las más observadas en la historia de nuestro estado. Más de mil 835 observadores electorales se encuentran inscritos y forman parte del grupo de vigías que se encargarán de que las autoridades electorales lleven acabo bien su trabajo.
A ello sumaría un despliegue operativo de cerca de 3 mil fuerzas de seguridad locales y otra buena parte de policías federales que vigilarán el orden durante los comicios. No está de más mencionar, la Fiscalía Especializada para Delitos Electorales ha enviado a 300 Ministerios Públicos Federales para dar respuesta inmediata a las anomalías y quejas de la ciudadanía el día de la jornada.
El proceso terminó con el cierre de campaña de cada uno de los candidatos. La responsabilidad ahora es de cada uno de los ciudadanos, de votar pensando en lo que mejor conviene a la colectividad. Lo que hace falta por hacer en Oaxaca y aquello que no podemos alentar a que siga sucediendo. Votar con toda la fuerza y el ánimo es hacer ciudadanía.
Hace cuatro años (2006), Oaxaca tuvo una de las mayores participaciones históricas en un proceso electoral. El 2009 no dejó el mejor sabor de boca, pues la convocatoria no fue la deseada. Que este 4 de julio sea una elección donde ni el clima, ni las presiones externas, sean una razón para no votar.
Que el corazón y la convicción por tener una mejor tierra nos mueva el día de hoy, para tener un gobierno más activo en la toma de decisiones del resto del país.
Un lugar que le devuelva la dignidad y liderazgo a su gente, donde cada uno de nosotros pueda mirar con orgullo al otro, por vivir en una tierra más libre, justa y con mayor democracia. Ese es el nuevo Oaxaca que todos queremos ver.