Oaxaca presenta una debilidad en el sector de agua y saneamiento

Oaxaca, Oax. 13 de julio de 2013 (Quadratín).- El dirigente del Colectivo de Organizaciones Ambientalistas de Oaxaca (COAO), Nazario García dio a conocer que el estado de Oaxaca tiene una debilidad institucional en el sector de agua y saneamiento, toda vez que la capacidad operativa y recaudatoria es muy inferior a la de otros estados del país.
Dijo que la actual condición del sector se debe a las fugas en las redes que son cercanas al 50 por ciento.
Añadió qué además la recaudación actual por derechos y servicios de agua es únicamente por 3 de cada 10 litros que reciben los usuarios y las tarifas cubren menos del 25 por ciento del costo de operación y mantenimiento de los sistemas hídricos.
”En 2011 el Gobierno del Estado comenzó una actualización gradual de las tarifas por derechos de agua, después de 20 años de mantenerse en los mismos precios, lo que ocasionó una operación deficitaria en el organismo operador de los Valles Centrales, el más grande del estado”, comentó.
Explicó que también más del 30 por cieno de la población no tiene acceso a agua entubada y en muchos casos el agua extraída de los acuíferos no cumple con la Norma Oficial Mexicana de Calidad.
Y en la Zona Metropolitana de los Valles Centrales el 95 por ciento de la población tiene servicio discontinuo, o sea tandeado cada cinco a 10 días, y el 60 por ciento recibe máximo 5 horas al día.
Criticó que A nivel estatal el 29.2 por ciento de las viviendas no cuenta con servicio de drenaje y existen 223 municipios donde este porcentaje es mayor al 50 por ciento.
Aseveró que los efectos de una mayor y mejor cobertura de agua entubada, el cumplimiento de las normas de potabilidad y servicio de drenaje, abatiría la tasa de mortalidad por enfermedades diarreicas, que en particular para Oaxaca es del 33 por ciento por cada 100 mil habitantes menores de cinco años.
En este sentido, manifestó que la degradación de las cuencas hidrológicas, su contaminación por tiraderos de basura sin control, las malas practicas agropecuarias, los deficientes procesos de potabilización y saneamiento presentan un panorama negativo, ante el cual grupos civiles, organismos internacionales y gobiernos deben intervenir.

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