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Oaxaca, Oax., 30 de agosto del 2011(Quadratín).- Olivia Jiménez, quien se recupera en el Hospital Civil luego de ser atacada por su ex marido a machetazos, asegura que el agresor trabaja para Amador Jara desde hace un año. Reclamó protección y cárcel para Otilio Lorenzo, quien se encuentra prófugo, ya que está armado y es peligroso.
Olivia Jiménez García, de 32 años, ingresó al hospital la noche del 24 de agosto, con la mano derecha casi amputada por el ataque de su ex marido, Otilio Lorenzo Miguel. Ahora evoluciona favorablemente luego de ser atendida por cirujanos del Hospital.
En entrevista, manifestó que es la tercera vez que denuncia a su ex marido por maltrato y golpes, y aseguró que Lorenzo trabaja como escolta del dirigente del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Amador Jara, y que es imposible que éste no lo conozca, como dijo en declaraciones a la prensa. Cómo no lo va a conocer si trabaja con él desde el año pasado, manifestó Olivia.
Luego de realizar la denuncia correspondiente, Olivia fue entrevistada por personal del Ministerio Público y del Instituto de la Mujer, no obstante, dice no sentirse segura. El debería estar preso. Deseo que lo agarren porque ya no me siento segura; el siempre decía que si no lograba matarme, volvería a intentarlo. Si ahora fue con el machete, mi temor es que en el futuro sea con una pistola. El carga pistola, y gracias a Dios no la llevaba cuando me atacó.
Refirió que Lorenzo, de quien se separó en 2009, es una persona violenta y ya la había agredido en dos oportunidades. En el 2000 le levanté otra demanda por golpes. Pero nunca lo encarcelaron. El año pasado intentó matarme con gas, y yo lo denuncié, pero como yo no presentaba ningún golpe, sugirieron que no estaba diciendo la verdad. Yo les pregunté si tenía que ir con moretones o semimuerta para que me hicieran caso.
Olivia tiene tres niñas: Jazmín, Jennifer y Ángeles de 13, ocho y tres años, que están en su casa, en San Antonio de la Cal, cuidadas por los abuelos, que llegaron a Oaxaca desde Santiago Amoltepec, Sola de Vega, cuando se enteraron de lo sucedido. Me siento con rabia e impotencia, porque sola yo estaba sacando a mis hijas adelante trabajando en una cafetería. Actualmente, el Ministerio Público está custodiando mi casa, pero no sé hasta cuándo. No sé todavía que voy a hacer saliendo del hospital.
Refirió que la mañana del ataque, mientras ella estaba trabajando, Lorenzo llegó a su casa y mató a sus dos perros a piedrazos. Esa misma noche la atacó a machetazos frente a las niñas y salió huyendo, dejándola en un charco de sangre. Perdí el conocimiento durante un momento, pero reaccioné porque mis hijas gritaban que su mamá estaba muerta.
Agregó que su ex marido no le pasaba dinero para la manutención de las niñas y la chantajeaba y amenazaba. Desde que nos separamos, siempre me buscaba para que volviera con él, pero yo ya había tomado la decisión de no regresar. Me decía que no me daría dinero para las niñas si no regresaba con él. Cuando discutíamos sobre eso, me decía que me iba a meter cinco o seis plomazos, que me iba a desfigurar la cara, o que mandaría a sus amigos a matarme. Pero yo lo dejaba pasar.
La directora del Hospital Aurelio Valdivieso, Marta Silvia Martínez Luna, informó que la paciente ingresó al hospital con traumatismo cráneo encefálico y lesiones de arma corto contundente en diversas partes del cuerpo, que le provocaron la amputación parcial de la mano derecha, por lo que el 26 de agosto se le efectuó cirugía para reparar los nervios y tendones de la mano derecha. Al día de hoy la paciente está estable, la mano evoluciona favorablemente ya que hay buena temperatura y sensibilidad. Lo más seguro es que su mano se salve y que tal vez quede con algo de disminución de los movimientos. Agregó que se corroboró una fractura parietal derecha del hueso de la cabeza que no involucró la cavidad intra craneana.