Palabras del presidente del consejo general del IEEO, en la sesión del inicio del proceso electoral ordinario 2010

Oaxaca, Oax. 12 de noviembre de 2009

Consejeros electorales,
Representantes legislativos,
Y representantes de los partidos políticos,
Integrantes del consejo general del Instituto estatal electoral de Oaxaca,
Señoras y señores representantes de los medios de comunicación.
Ciudadanas y ciudadanos
Iniciamos el proceso electoral ordinario 2010, para la renovación de los poderes legislativo, ejecutivo y de los concejales a los 152 ayuntamientos del estado, que se rigen por el sistema de partidos políticos, en el marco de una legislación renovada, con la perspectiva de que el voto ciudadano sea el eje central de nuestras decisiones.
Abordamos esta nueva etapa de la democracia en nuestro estado, asumiendo positivamente las disposiciones en materia electoral, que el legislador plasmó recientemente en la constitución particular y en el código de instituciones políticas y procedimientos electorales de Oaxaca.
Al declarar la apertura de este ejercicio democrático, suscribimos también nuestro compromiso de responder con firmeza, a los desafíos que nos llama la legislación electoral. Actuar con transparencia y rendición de cuentas, implementar un modelo adecuado para el acceso de las fuerzas políticas a la radio y la televisión, desarrollar las precampañas y campañas electorales en un periodo más reducido, celebrar la jornada electoral en una sola fecha, así como la calificación de las elecciones, son, entre otros, los principales retos.
De cara al proceso electoral que hoy comienza, la ciudadanía oaxaqueña cuenta con un instituto estatal electoral, fortalecido y preparado para conducir las elecciones, como lo ha hecho en 12 comicios por el sistema de partidos políticos, y la celebración de casi 3 mil asambleas comunitarias en el régimen de usos y costumbres, durante los últimos 17 años. Para el año 2010, el principal cometido consiste en conformar un ambiente propicio para la participación ciudadana, con equidad y certidumbre en la competencia política, que genere una vasta confianza en el electorado.
Acrecentar la confianza social en el voto y su efectividad, requiere multiplicar esfuerzos. Por ello, en forma inmediata convocamos a las ciudadanas y los ciudadanos de nuestro estado, a participar en las elecciones. Pronto acudiremos al domicilio de los ciudadanos que sean designados como funcionarios electorales, para capacitarlos debidamente. Impulsaremos la intervención de los observadores electorales, que garantice la transparencia en el desarrollo de los actos de preparación y desarrollo, así como de la propia jornada comicial. Hacia el electorado, dirigiremos una intensa campaña de promoción, con la expectativa de que, en el marco de la pluralidad política, el sufragio sea el resultado de la reflexión y libre decisión de quien vota.
De los municipios que electoralmente se rigen conforme al derecho consuetudinario, con toda oportunidad las autoridades de los 418 ayuntamientos, han expresado a este órgano electoral, el deseo de las comunidades por preservar las reglas de la democracia comunitaria en la renovación de sus concejales. Y así se hará. Los usos y costumbres continuarán por voluntad de los pueblos indígenas, respaldados por el respeto y apoyo de este órgano electoral.
El centro del sistema electoral lo constituye la integración de los poderes públicos, mediante el ejercicio del voto. Por tanto, las elecciones representan la oportunidad de manifestar el poder de decisión de los ciudadanos que la constitución federal y la local, les confiere. Y no es poca cosa lo que está en escrutinio, además de la representación política, se trata de optar por alguno de los proyectos que perfilen un mejor futuro para nuestra entidad y sus habitantes. De aquí nuestra convocatoria a las distintas organizaciones de la sociedad civil para que, sin apartarse de sus ideales ni posturas reales, contribuyan a fortalecer el ambiente de civilidad política y a motivar el ejercicio de los derechos político-electorales.
A los partidos políticos, corresponsables de estas elecciones, ratificamos nuestra disposición a un trato con equidad, respeto y calidad en la atención institucional. Emprenderemos cuanto esté de nuestra parte para fortalecer la democracia electoral, pero también requerimos de campañas con propuestas congruentes a las aspiraciones de los oaxaqueños. Una competencia que genere opinión pública crítica, pero observadora de los derechos fundamentales de las personas, mirando siempre hacia el bien común. A los medios de comunicación, de antemano, nuestro reconocimiento por su empeño en informar oportunamente a la sociedad oaxaqueña. Apreciamos que cotidianamente contribuyan al fomento de la cultura electoral participativa. Creemos firmemente que la opinión pública bien informada, se convierte en base importante para la libre decisión ciudadana en las casillas electorales.
A las mujeres oaxaqueñas queremos reiterarles que las disposiciones contenidas en la actual legislación electoral, aseguran su derecho a la plena participación. Este órgano electoral, por su parte, será respetuoso de las voces y planteamientos de las ciudadanas. Su participación y su voto tienen el mismo valor que el de cualquier ciudadano.
A los jóvenes les pedimos que muestren su disposición a la participación política y electoral. Con muchos de ellos hemos venido haciendo ejercicios electivos desde sus espacios escolares. Con la nobleza que permea sus conciencias, les decimos que ha llegado el momento de ejercer sus derechos como ciudadanos.
El instituto estatal electoral de Oaxaca, tiene la obligación de conducir las elecciones conforme a la ley y a los principios por ella establecidos. Nuestro mayor compromiso es que prevalezca la legalidad.
Señoras y señores
El próximo domingo 4 de julio del 2010, por primera vez celebraremos, en una sola jornada electoral, las elecciones de diputados locales, gobernador del estado y concejales en 152 ayuntamientos que se rigen por el sistema de partidos políticos. Con los 418 municipios que se rigen por el sistema de usos y costumbres, tenemos el firme compromiso de respetar los tiempos y formas de elección.
No quiero dejar pasar la oportunidad para señalar que en el año 2010, año en que los mexicanos celebramos el bicentenario de la gesta de independencia y el centenario de la revolución mexicana, en Oaxaca estamos empeñados en alcanzar, por el camino de la democracia, el orden social que proyectaron los forjadores de nuestra patria.
Muchas gracias.

Foto: Archivo