Exige Congreso al Ejecutivo atender problemática del agua en Juchitán
OAXACA, Oax. 6 de mayo de 2015.- Oaxaca solicitará a la Secretaría de Gobernación (Segob) la declaratoria de emergencia para atender a unos 350 prestadores de servicios que vieron afectados sus establecimientos por el mar de fondo que impacto en unas 30 playas de Oaxaca.
El director del Instituto Estatal de Protección Civil (IEPC), Felipe Reyna Romero, informó que en una evaluación preliminar, se ubicaron 8 municipios con afectaciones por este fenómeno que provocó olas de hasta 10 metros de altura.
Mencionó que después de hacer un recorrido por la zona afectada y reunirse con autoridades municipales, comenzó una jornada de limpieza que busca restablecer a la brevedad el servicio que prestan al turismo que acude a la zona.
“De manera preliminar podemos decir que los principales daños se sintieron en los restaurantes que están cerca de la playa, los servicios turísticos que ofrecen unos 350 locales, en 8 municipios del litoral oaxaqueño”.
Además, ubicaron entre 50 y 60 viviendas que también tienen afectaciones por este fenómeno, del que no se tiene precedente reciente, pues los pobladores refieren que desde 1950 no se presentaba un hecho similar.
“Hay establecimientos que tienen todavía 2 o 3 metros de arena, se organizaron cuadrillas en las que participan pescadores, restauranteros y personal de Protección Civil para sacar más rápido la arena, en Pochutla el ayuntamiento prestó una máquina y también en Zicatela”.
El director de Protección Civil en Oaxaca mencionó que aún continúa como desaparecido el joven Irving Lavariega Corcuera, de 22 años de edad, quien estaba pescando cuando una ola lo arrastró en Huatulco el fin de semana.
Reyna Romero dijo que en la playa del Panteón, en Puerto Ángel, los negocios quedaron prácticamente sepultados entre la arena, que es una de las zonas más afectadas.
Con la declaratoria de emergencia esperan, de aprobarse, recibir insumos y kit de limpieza para ayudar a los prestadores de servicios en la zona y tratar de disminuir el efecto económico que causará por no poder abrir al público.
Hasta el momento continúa la alerta por la continuidad de este fenómeno que afectó estados como Chiapas, Guerrero y Sinaloa, entre otros.