
Almuzara Libros México, presente en la FIL de Palacio de Minería
OAXACA, Oax. 6 de noviembre de 2013 (Quadratín).-Doña “Chela”, como cariñosamente le llaman, tiene muchas fuerzas todavía para escribir y contar historias.
Arcelia Yañiz, decana en el ejercicio periodístico, mujer que a los 95 años de edad recibió su título de licenciada en Periodismo, acaba de editar su quinto libro, “Oaxaca de mis amores: cosas, casos y personajes”, en su tomo 2.
Este miércoles dio a conocer que el volumen será presentado este sábado, en la Casa de la Cultura Oaxaqueña, y cuya edición fue costeada por el editor Claudio Sánchez Islas, hijo de otro afamado periodista de su generación, don Néstor Sánchez.
Pese a los años de experiencias, doña “Chela” no pierde el glamour. Porta traje sastre de intenso azul; rostro bien maquillado, uñas arregladas, aretes, collares y anillos realzan aún más su personalidad.
Con paciencia atiende a noveles periodistas, muchos de ellos, mujeres, que acudieron a escuchar la primicia, quiere escribir otro libro, ahora sobre cocina de antaño.
En la Charla, la maestra Yañiz recomienda a los nuevos comunicadores leer mucho y escribir bien; a ella dice que le gusta el género de la crónica, pero sobre la gente, sobre el acontecer cotidiano, sobre las necesidades del ciudadano común, no desde o para el poder.
Larga plática en la que rememora sus más de 50 años de trayectoria periodística, el periodismo “de antes”, a diferencia del que se hace hoy.
De sus sueños en la niñez, sobre escribir libros. De sus amistades, de su trabajo, de su interés por los libros, lo que la ha mantenido desde hace varios lustros en servicio, en la Biblioteca Pública de Oaxaca.
“Arcelia Yañiz, Oaxaca de mis amores: cosas, casos y personajes”, es una recopilación de sus memorias sobre personajes, lugares históricos, sucesos extraordinarios en la entidad, la vida social y política de su época, el periodismo y un sinfín de temas.
“Mientras esté viva, voy a seguir escribiendo”, expresa doña Arcelia Yañiz, que da paso luego al obsequio de su libro y a una serie de autógrafos, con tanta paciencia como sus años de vida y en la actividad que más le apasiona, el periodismo.