Preserva gobierno municipal tradiciones oaxaqueñas

Oaxaca, Oax. 25 de marzo de 2010 (Quadratín).- El Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez a través de la de Coordinación de Desarrollo Municipal, se ha integrado a los diversos festejos que engloban la Cuaresma y Semana santa en esta capital. Y como cada año dentro del calendario de festividades, una tradición que no puede faltar es la instalación del Altar de la Virgen de Dolores, celebración de gran arraigo entre las familias oaxaqueñas.
El sexto viernes de cuaresma se ha vuelto en la verde Antequera una tradición de mucha devoción y veneración para la grey católica, quienes rinden culto a la madre de Dios colocando un altar en las iglesias, casas u oficinas como una forma de expresar la aflicción y dolor que sufrió al ver a su hijo sacrificarse por la humanidad.
La Coordinadora de Desarrollo Municipal, Luz Divina Zarate Apak, informó que dando seguimiento a las instrucciones del encargado del despacho de la Presidencia Municipal, Miguel Ángel Bustamante Underwood, se llevará a cabo la inauguración del Altar de la Virgen de Dolores en las instalaciones del Museo de los Pintores Oaxaqueños a las 17: 30 horas.
Explicó que la asesoría y montaje estará a cargo de la Asociación Folklórica Oaxaqueña, A. C., presidida por la Profesora Margarita Toledo de García Romero y el Profesor José Demetrio Quiroz Alcántara.
La imagen de Virgen de los Dolores la facilitará la Parroquia del Carmen Alto, a través del Padre Francisco Reyes, quien imparte la bendición del mismo.
Zárate Apack agregó que en este marco, se realizará un programa solemne en el cual se recitan los versos de la Virgen de Dolores, Bendición del Altar, lectura de poesías alusivas e interpretaciones de música sacra con la participación del Coro de la Ciudad bajo la dirección del maestro Israel Rivera Cañas y el cuarteto de cuerdas Amadeus Mozart, que dirige el maestro Honorato Cruz Santos.
Esta tradición católica data de la época virreinal en la que se recuerdan los sufrimientos de la Virgen María por la pasión y muerte de Jesucristo. La primera conmemoración se dio en el siglo XV y fue el Papa Benedicto XIII quien la estableció en 1727, bajo el nombre de Señora de los Siete Dolores.
Como en la antigua costumbre, se instala el Altar de Dolores en templos y en casas particulares, el altar se coloca bajo un dosel de cortinajes decorado con diversos objetos simbólicos, tradicionales macetas de barro claro, figuras de animalitos trabajados en arcilla porosa para que germinen los granos de chía, flores de fresco perfume, manojos de laurel de álamo que se expenden en las calles y mercados de la Ciudad durante esta temporada.