Prevalecen desinformación y mitos sobre lactancia materna

OAXACA, Oax. 2 de agosto de 2014 (Quadratín).- Integrantes del Grupo de Apoyo a la Lactancia y la Crianza de Oaxaca presentaron los resultados de la encuesta sobre la lactancia aplicada en la ciudad de Oaxaca y municipios conurbados, de la que se desprende que los profesionales de la salud más que promover la alimentación del bebé con pecho, la combaten.

Señalaron que en los últimos años ha disminuido de manera dramática la práctica de esta función biológica lo que repercute en el deterioro de la salud tanto de los niños como de sus madres.

Actualmente, agregaron, México es el país que presenta los menores índices de lactancia materna en América Latina con tan solo 14.4 por ciento de mujeres que amamantan de manera exclusiva a sus bebés los primeros 6 meses. Hace solo 8 años la cantidad era de un poco más de 22 por ciento. En el sector rural la disminución de la tasa de lactancia materna es aún más dramática, pasando de 36.9 por ciento en 2007 a 18.5 por ciento en 2013, es decir, 50 por ciento menos.

En el marco de la Semana Mundial de la Lactancia Materna 2014, Margarita Pesoa, integrante de la agrupación, indicó que en Oaxaca se aplicó una encuesta a 308 madres de familia con el fin de conocer cuál es la información con respecto a lactancia materna que están recibiendo de parte de los profesionales de la salud que las atienden y de qué manera ésta incide en el tiempo y la forma en que deciden amamantar a sus bebés.

Del total de mujeres encuestadas, 42 por ciento amamantó o planea amamantar a su bebé de 6 a 12 meses. El 30 por ciento lo hizo o planea hacerlo de 1 a 2 años, 15 por ciento más de 2 años, 7 por ciento de 3 a 6 meses, 3 por ciento de 0 a 3 meses y el 3 por ciento restante no amamantó. Según estas cifras, la mayor parte de las mujeres está amamantando a sus bebés tan solo el tiempo mínimo saludable y el porcentaje que cumple con el ideal de alimentación para los bebés recomendado por la OMS (por lo menos 2 años) es muy bajo aún (sólo 15%).

En la encuesta, que consistió de 8 preguntas, se enlistaron 13 recomendaciones inadecuadas comúnmente citadas por las madres usuarias de los servicios de salud que van en contra de las recomendaciones hechas por la OMS y que carecen de fundamento a la luz de la evidencia científica actualizada. Del total de mujeres encuestadas, 88 por ciento recibió alguna recomendación inadecuada de un profesional de la salud, 8 por ciento no recibió alguna de las recomendaciones inadecuadas listadas y 4 por ciento no consultó a ningún médico sobre lactancia materna.
Precisó que de las recomendaciones inadecuadas realizadas las 5 más frecuentes fueron: a partir de los seis meses tu leche ya no alimenta, deben amamantar con horario fijo, no tienen suficiente leche o es necesario amamantar con fórmula.

Asimismo, los profesionales de la salud recomiendan de manera errónea a las madres destetar al bebé porque ya está grande y que antes de los seis meses deben darle al bebé otros líquidos en biberón además de leche materna.

Destacó que el 46 por ciento de las recomendaciones inadecuadas fueron realizadas por un médico especializado en pediatría, 25 por ciento por un médico general, 10 por ciento por una enfermera, 7 por ciento por un ginecólogo y el 12 por ciento restante por otras especialidades.

Ante este panorama planteó que los médicos se capaciten en lactancia materna, además de que se deben impulsar campañas permanentes de promoción, protección y apoyo a esta práctica.

Señaló que existe evidencia científica que demuestra que la lactancia materna protege a los bebés contra infecciones durante el tiempo que dure la lactancia, reduce el riesgo de que padezcan muerte súbita, obesidad, diabetes, enfermedades cardíacas, asma, dermatitis atópica y cáncer; favorece su óptimo desarrollo mental, visual, oral y además disminuye el riesgo de que los niños sean maltratados o abandonados permitiendo que establezcan vínculos más afectivos y respetuosos.

La lactancia materna también favorece la salud de las madres inmediatamente después del parto y las protege a largo plazo contra el cáncer, la osteoporosis y la diabetes.