Fortalece Fiscalía de Oaxaca transparencia y rendición de cuentas
MÉXICO, DF. 24 de noviembre de 2013 (Quadratín).- La imposición de una reforma constitucional para privatizar Pemex y la CFE podría llevar a una revuelta social nacional en contra del Gobierno de la República y sus instituciones, sería la “madre de todas las protestas” sociales y políticas, advirtió el senador del PRD Benjamín Robles Montoya.
“El Gobierno Federal y su partido el PRI, así como sus aliados políticos, tienen que calcular bien el costo político y social que implicaría una imposición de esa magnitud al tratar de entregar los recursos energéticos mexicanos a capitales extranjeros. Las protestas interminables que ha dejado la reforma educativa en la capital del país y en varios estados de la República, se quedarían cortas comparadas con las movilizaciones patriotas por la defensa de petróleo y los energéticos”, adelantó.
Robles Montoya, uno de los principales impulsores de la recaudación de firmas por la defensa del petróleo y los energéticos, dijo que entre los mexicanos persiste ese sentimiento de propiedad nacionalista que dejó sembrado el general Lázaro Cárdenas, cuando quitó a las empresas extranjeras la industria petrolera para entregarla a la Nación, con la ayuda de millones de ciudadanos.
“No podemos permitir que una industria que le costó en esfuerzo y dinero a nuestros antepasados, quienes dieron sus ahorros para pagar las indemnizaciones a las empresas extranjeras que tenían en su poder el petróleo, ahora de un ‘plumazo’ el Gobierno de la República pretenda regresarla, sin costo alguno, nuevamente a los grandes capitales extranjeros, eso es incongruente”, recriminó.
Refirió que actualmente la izquierda mexicana realiza un gran movimiento para recolectar más de un millón 600 mil firmas, para exigir a la Suprema Corte de Justicia de la Nación ordene la realización de una consulta popular para que sean los mexicanos quienes decidan qué hacer con los recursos energéticos y no un gobierno, su partido y sus aliados políticos.
La reforma energética, dijo el senador por el estado de Oaxaca, se trata de un asunto de gran interés nacional, porque de él depende el futuro del país, ya que representa la mayor fuente de ingresos del país y sostén de la acción de gobierno, por lo que compartir las rentas petroleras con capitales extranjeros podrían en un situación de vulnerabilidad financiera y de reservas energética a México.
“A nadie le conviene despertar la indignación ciudadana generalizada, el PRI-Gobierno debe de respetar la voluntad y el sentimiento de los ciudadanos, debe mostrar mayor madurez y sensibilidad política, despojarse de esas actitudes rapaces que le han caracterizado, asumir un verdadero papel de jefe de estado y velar por los intereses nacionales”, recomendó el congresista federal.