Diferencias entre un estúpido y un idiota
Signos y Señales
MÉXICO, DF., 25 de enero de 2016.- El tema que pocos quieren comentar, pero en el que todo mundo piensa, es el del temor social al impacto de la inflación, particularmente en la canasta de consumo de las clases de menores ingresos e incluso de amplios sectores de la clase media.
Es claro que nuestro aparato productivo depende de la importación de lo que en los setentas, alguien llamó bienes de mantenimiento; esto es, refacciones y piezas sueltas o insumos importados para la agricultura, lo que ha generado cambios en los patrones de producción, lo que se tradujo en dependencia alimentaria, importamos soya por ejemplo.
Por otra parte, las remesas de los mexicanos que trabajan en el exterior han llegado a los niveles de los ingresos energéticos y de turismo, lo que depende de la migración de mexicanos que no han encontrado en México una ocupación digna y formal, que les permita cubrir las necesidades esenciales de sus familias, lo que significa dependencia laboral; a su vez, la insuficiente inversión en producción y exploración de petróleo, así como la parálisis de la inversión en petroquímica, incluso al costo de concursar la nueva refinería de Tula en el gobierno de Calderón, lo que se sustituyó por el mensaje de que íbamos a importar una refinería completa desde Estados Unidos, así como a modernizar las refinerías de Salina Cruz y Salamanca, pero no se hizo nada, el volumen exportado se ha caído y somos importadores netos de gasolina, lo que ha provocado que en México su precio sea casi el doble de Estados Unido, debido a la diferencia impositiva. Esto es el nuevo impuesto fijo al consumo de gasolina, esto significa que hoy padecemos dependencia energética. Bueno parece que se resolvió lo de la deuda de Hidalgo para la nueva refinería.
En resumen, dependencia de decisiones de política económica, producción y de precios determinados desde el exterior.
Por cierto, acaba de aparecerán un buen libro de Manuel Aguilera Gómez, exjefe de gobierno de la ciudad, también fue presidente del Colegio Nacional de Economistas y muchas cosas más sobre el tema petrolero. Vale la pena leerlo.
Lo anterior para comentar sin mencionar lo que pasa en enero con las participaciones en impuestos federales concurrentes y coordinados, los cobra el centro, ahora sí tendrán problemas en 2016, a pesar del buen trabajo que en el sexenio ha tenido el SAT con Aristóteles Núñez al frente.
En 2015 se recaudaron más de 300 mil millones de pesos por el IPEPS de gasolinas, para 2016 ya con una base fija de pesos por litro, se estima recaudar 190 mil millones de pesos.
No se prevé incremente el volumen de petróleo exportado, porque no se puede.
La caída del precio a niveles dramáticos, ahora porque Irán regresa al mercado, estimado en 49 dólares para el Presupuesto Federal, ha llegado a estar por debajo de 20 dólares. En 2015 esta caída se compensó con el IEPS de gasolina, hoy se ve difícil.
El precio de la gasolina importada se encarecerá en pesos, dado que el tipo de cambio ya superó los 19 dólares, por los problemas chinos.
Las coberturas no cubren toda la producción, ni todo el tiempo; cubren una parte, por cierto no participable para estados y municipios.
Por lo tanto, habrá problemas en las finanzas locales, incluidos los de las doce entidades que este año cambiarán gobierno, además del de Colima, cuya elección se repitió, ganando nuevamente el candidato del PRI.