Raúl Toledo Dehesa / La agenda legislativa del PRD (primera parte)

Oaxaca, Oax. 26 de octubre de 2010 (Quadratín).- En días pasados, el diputado electo y próximo coordinador del Grupo Parlamentario del PRD en la Cámara de Diputados, Carol Antonio Altamirano presentó la agenda legislativa que los legisladores de su fracción impulsarán a partir del próximo 15 de diciembre.
Con esta presentación el PRD, pero principalmente sus legisladores, cumplen con el compromiso asumido con la sociedad oaxaqueña; presentar una agenda legislativa para impulsar la transición con el fin de acompañar al gobernador electo Gabino Cué y a los partidos integrantes de la coalición electoral integrada con el PAN, PT y Convergencia, a demostrar con creces que como legisladores caminarán con los oaxaqueños en el largo y sinuoso camino que representará la transición democrática en Oaxaca.
Dividido en dos ejes, la agenda legislativa del PRD impulsará la nueva arquitectura institucional que reclaman los oaxaqueños y necesaria para terminar con décadas de atraso en materia constitucional.
El primero, es la renovación de las instituciones del viejo régimen vertical y autoritario para crear una nueva institucionalidad.
En este sentido, señalan “Las y los legisladores del PRD asumimos que el sistema político tiene sentido solamente si el centro de su actuar es el ciudadano. Eso nos diferencia de las concepciones políticas del viejo régimen, en las cuales el centro y la prioridad es el poder por sí mismo; de forma que a los ciudadanos se les relega, manipula o condiciona, usando las instituciones públicas para el resguardo y promoción de los intereses particulares en vez de ponerlas al servicio de la sociedad”.
Por otro lado, destaca en esta agenda legislativa el compromiso de que los organismos de procuración de justicia, de vigilancia y promoción de los derechos humanos, de transparencia así como la fiscalización del gasto público no deben estar vinculados a ninguna herencia partidista y deben incrementar su profesionalismo e independencia de criterio.
Este es uno de los retos más importantes en los que deberán centrar sus esfuerzos los legisladores del PRD y sus aliados; ya que en todo proceso de transición, no es fácil romper con estructuras caciquiles que se han perpetuado a lo largo de ochenta años.
Al reconocer la necesidad del fortalecimiento de los municipios en el desarrollo de sus capacidades y transfiriéndoles recursos para atender a las comunidades, los legisladores perredistas inyectan un criterio fundacional para todo proceso de transición, que es el de regresar a las comunidades sus capacidades gestoras a partir del reconocimiento tácito de que los municipios requieren recursos, que sabemos son insuficientes, pero durante años manejados por estrictos criterios políticos.
El segundo eje en el que se moverán los diputados del PRD es el atender las necesidades sociales sin ningún sesgo partidista.
De ahí que retomando las políticas sociales que se han impulsado en otras regiones del país, principalmente el Distrito Federal, se propongan mejorar la calidad de vida de los adultos mayores para que reciban beneficios independientemente del tamaño de la comunidad donde residan, brindar apoyo económico a las madres que pierdan sus empleos, becas y atención a los jóvenes que cursan la educación superior en instituciones públicas y respaldar a los niños inscritos en escuelas públicas que requieren útiles escolares de manera gratuita.
Este propósito de carácter social da sustento a los compromisos asumidos en campaña por el gobernador electo Gabino Cué, quien en los últimos días ha generado una corriente de opinión en torno a que Oaxaca reclama de la Federación los apoyos necesarios para atender los rezagos históricos, pero sobre todo, construir el futuro, que ya no puede ser el de la migración, la evasión de recursos públicos, la impunidad y las obras inconclusas.
Seguramente el PRD y sus diputados en voz de su coordinador parlamentario, Carol Antonio Altamirano contribuirán a tender los puentes con los diputados del PRI para sentar las bases de un nuevo marco constitucional que coloque a Oaxaca a la vanguardia de los tiempos políticos. Es lo menos que se espera de ellos.