Raúl Toledo Dehesa/ La lógica del grupo en el poder

“En cada ciudad podemos hallar estos dos deseos diferentes (…) el hombre del pueblo odia recibir órdenes y ser oprimido por aquellos más poderosos que él. Y a los poderosos les gusta impartir órdenes y oprimir al pueblo. Maquievelo.

México, D.F., 5 de marzo de 2012 (Quadratín).-La disputa por la integración de las fórmulas al Senado de la República por Oaxaca es el mejor síntoma de las ansiedades del actual grupo en el poder para no verse afectados por las recomposiciones internas por las que están atravesando sus opositores, particularmente el PRI.
La necedad del gobernador de imponer a su Benjamín como candidato de las fuerzas progresistas al Senado esconde en realidad su pretensión de que quien es su mentor político llegue sin problemas al senado por el PAN.
Algunas expresiones internas del PRD compraron o les vendieron el discurso de que Benjamín Robles es la mejor carta de presentación que tiene el gobernador para que las fórmulas del PAN y del Movimiento Progresista puedan mandar a la fórmula del PRI al tercer lugar. Nada más falso para el sentido común.
La lógica que les vendió fue que los acuerdos y alianzas que mantiene con exgobernadores priistas, particularmente José Murat, les puede dar para continuar fracturando al PRI en Oaxaca, pensando que desde el gobierno y con recursos se puedan levantar las alicaídas campañas que actualmente se están desarrollando.
Lo que no les compartió, es que el mejor candidato para el Senado en la lógica del grupo en el poder es precisamente impulsar a Benjamín Robles pero para que Diódoro Carrasco pueda llegar sin problemas al nuevo edificio de Reforma en la Ciudad de México, quien no representa ya ningún peligro, en virtud de su calidad de exgobernador constitucional.
Frente a la caída en la percepción de la votación y posibilidades de ganar, según las encuestas nacionales, por parte de López Obrador, el grupo en el poder apuesta a garantizar un espacio para el grupo diodorista. Así el gobernador se posiciona frente a Josefina Vázquez Mota, deja pasar a los priistas y se reconcilia con Enrique Peña Nieto y hunde al PRD, en aras de reposicionar al Movimiento Ciudadano para las próximas elecciones locales del 2013, esas que le interesaran de sobremanera.
La más reciente encuesta sobre la percepción de la calificación gubernamental en Oaxaca refleja una caída en los positivos que se obtuvieron después del triunfo electoral y de la movilización ciudadana más importante que se haya llevado en la entidad; de ahí que algunos funcionarios de muy alto nivel hayan terminado por renunciar para buscar otras posiciones, y de otros, que ya queriendo renunciar les han pedido, casi rogado que continúen para no seguir minando la maltrecha imagen que tiene el actual gobierno.
Lamentablemente en el PRD compraron el discurso de que quien manda pone, esa es la lógica que permitirá llevar como candidato al exfuncionario público que a través del dispendioso uso de recursos recorre la entidad en una avioneta, lo que contribuyó al rechazo de su candidatura.
El grupo en el poder sabe muy bien que será difícil que algunas expresiones internas del PRD se sumen a esa candidatura al Senado, ellos juegan en esa lógica. Por su parte, al candidato al Senado no le importa perder, pues regresaría sin problemas a ocupar un cargo importante para seguir decidiendo en el gobierno y llevarlos a la ruta del fracaso; eso sí, tendrían un partido, que es la primera fuerza política en el estado, fragmentado y dividido para presentarse en el 2013 como la opción policía más importante para la entidad.
El grupo en el poder no está pensando en el 2012, sus intereses están enfocados en el 2013 y en el 2016, ya con un partido de izquierda fragmentado.
La lógica que ha movido a algunos dirigentes políticos y a los resultados de las encuestas que les mandaron hacer es que en Oaxaca se puede mandar al PRI al tercer lugar en la votación en la entidad, pactando algunos distritos federales para los candidatos de los grupos que le son afines.
Esta lógica no va con el sentido común, menos con cualquier análisis matemático, es muy difícil, si les resulta seré el primero en reconocerlo, que frente a los números que actualmente trae el PRI en la entidad, el crecimiento de la candidata panista y el escaso repunte del PRD, pueda darse el escenario de que las fórmulas de este último lleguen al Senado como en el 2006.
Perversa la lógica, pero más perverso es que haya dirigentes que la compraron, sobre todo reconociendo el riesgo latente de que el PRD en Oaxaca, después de tener senadores desde 1994, se quede sin uno en el 2012.
Foto:Archivo