Llora, el país amado…
Oaxaca, Oax. 3 de mayo de 2010 (Quadratín).- Una lectura del discurso del candidato a gobernador por la alianza PRI-PVEM deja muchas dudas y obliga a plantear algunas interrogantes sobre la decisión de cambiar la estrategia de campaña de Eviel Pérez Magaña.
¿No era su propuesta seguir con la transformación en Oaxaca?, ¿no era su propuesta la continuidad del régimen basado en los seis años perdidos del gobierno que encabeza Ulises Ruiz?
¿No su campaña se sustentaba en la continuidad y continuismo del gobierno de su mentor político?, ¿No invitaba a los oaxaqueños a seguir al PRI de Ulises? ¿De dónde entonces el NUEVO PACTO SOCIAL? ¿Con quién o quiénes construirlo?
Con los maestros a los que mandó a golpear su protector; con las mujeres por las que este gobierno mantuvo en olvido, que siguen padeciendo de enfermedades curables que pudieran ser atendidos por programas de salud dirigidos específicamente a ese sector. Con los empresarios que tuvieron que cerrar sus negocios y salir huyendo de Oaxaca para rescatar algo de su patrimonio a consecuencia de la ingobernabilidad que vivió la entidad durante estos seis años.
Con los dirigentes sociales a los que encarceló. Con los dirigentes de los partidos políticos a los que cooptó. Con las organizaciones civiles y organismos gubernamentales a los que encasilló y terminó por atacar a mansalva.
Con los medios de comunicación independientes a los que el gobierno del estado pretendió vulnerar en su capacidad financiera.
Con los pueblos indígenas de Oaxaca que siguen viviendo en el olvido, sin apoyos sin programas, sin políticas públicas que les permitan superar décadas de atraso y marginación.
Con los pescadores rivereños de las costas de Oaxaca que siguen esperando apoyos del gobierno del estado para enfrentar las vedas impuestas por el gobierno federal.
Con los productores de café, comunidades indígenas enteras sumidas hoy en la más explosiva miseria por la caída de los precios internacionales de este producto y sin incentivos que les permitan hacer frente a su crisis.
Con los empresarios del sector turístico afectados por la mala imagen que tiene Oaxaca construida a pulso por el gobierno en los últimos años. ¿Cómo salir a promover el estado si en la entidad el mismo gobierno promueve la violencia contra los turistas, sean fotógrafos u observadores internacionales?
Con quienes construir el nuevo pacto social ¿con los empresarios del transporte?, ¿con los taxistas y permisionarios?, fuente inagotable de recursos y caja de la corrupción en el estado.
¿Por cierto, dónde quedó la campaña roja del PRI? En el cajón de los recuerdos, a partir de este domingo la campaña del PRI y del candidato será el blanco. ¿Es para la paz y la reconciliación entre los oaxaqueños después de lo de Copala y los viejos agravios que saben cobrarán los oaxaqueños en las urnas? Son sólo algunas preguntas.