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Oaxaca, Oax. 27 de junio de 2011 (Quadratín).- El padre Alejandro Solalinde informó que este lunes se presentaron dos denuncias ante la Procuraduría General de la República (PGR) por los delitos de privación ilegal de la libertad, uso de armas exclusivas del Ejército, abuso de autoridad, secuestro y demás que resulten.
En entrevista con Quadratín, dijo que en la averiguación previa PGR/OAX/SC/11/164/2011, presentada ante la Agencia Segunda Investigadora de la PGR con sede en Salina Cruz, presentaron su testimonio dos personas que viajaban en el tren y escaparon del presunto secuestro ocurrido en Medias Aguas, Veracruz.
Además, intervino la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para darle seguimiento a este hecho, que sería el más grave ocurrido en este año. El párroco, responsable del albergue Hermanos en el Camino ubicado en Ciudad Ixtepec, dijo que se calcula la desaparición de entre 60 y 80 personas.
Los testigos hablan de tres camionetas muy grandes, de lujo, en las que retacadas caben muchas personas, expuso.
Mencionó que este tipo de ilícito ocurre para extorsionar a los inmigrantes. El secuestro es para obtener dinero, los llevan a casas de seguridad y desde donde hay señal, exigen a sus familiares el pago de cinco o siete mil dólares y tienen que pagar durante meses este dinero, mencionó.
Lamentó que hasta el momento ninguna autoridad haya hecho nada al respecto y se continúe en la impunidad. Si dan con el paradero de estas personas romperían con la impunidad, porque en ningún caso se ha hecho justicia, añadió.
Explicó que de los aproximadamente 250 inmigrantes que llegaron al albergue, sólo 129 se registraron. De estos 129, 39 personas provenían de Guatemala, 40 de Honduras, 46 de El Salvador, seis de Nicaragua y había un número indeterminado de personas procedentes de Chiapas.
En todos los casos, expuso, ya se envió a los cónsules la relación de personas, con su nombre y su fotografía, pues esto ayudará a la identificación de los familiares que han estado preguntando sobre el paradero de quienes viajaban en el tren.
Es un drama para las familias, todos quieren saber qué pasó con su familiar y a veces nos dan otro nombre, pero con la fotografía pueden ser identificables, ahí están ya en los consulados los datos de estas personas, agregó.
Para el padre Solalinde, este nuevo hecho coloca a México como un país en el que cada vez hay mayor descomposición de la calidad de los políticos que tenemos, de las corporaciones policiacas que en vez de proteger hacen lo contrario, estamos más inciertos, cada día somos más secuestrables, más vulnerables porque nadie hace nada.
Expresó que en el albergue Hermanos en el Camino seguirán su labor aún cuando persisten las amenazas. Se solidarizó también como el padre Pedro Pantoja, de Saltillo, a quien han amagado junto con los voluntarios de su albergue.
No sabemos qué vaya a pasar, han amagado al grado de querer retirar, los gobiernos, los albergues, pero debemos seguir para que no haya impunidad, que estos hechos no queden impunes, expresó.
Foto: Serafín Sánchez