Continuarán las lluvias escasas y chubascos en zonas serranas de Oaxaca
MÉXICO, DF. 19 de enero de 2014 (Quadratín).- El desempleo y el alza en los precios de los productos básicos, como consecuencia de las fallidas reformas estructurales del Gobierno de Enrique Peña Nieto, incrementará el número de delitos en contra de ciudadanos, alertó el senador del PRD Benjamín Robles Montoya, integrante de la Comisión de Justicia del Senado de la República, por lo que urgió a implementar una estrategia integral de prevención del delito.
“Resulta alarmante enterarnos por los medios de comunicación sobre la alta incidencia de asaltos al transporte público, a transeúntes, robos a casa habitación y de vehículos, delitos todos estos considerados hasta cierto punto como comunes, pero que sin duda son el reflejo de la desesperación de muchas personas por la falta de oportunidades de desarrollo, como es la carencia de un empleo remunerado o no tener la garantía de un ingreso seguro para alimentar a su familia, por eso es necesario revisar la política de desarrollo económico nacional y de seguridad pública”, expuso el legislador federal.
Y es que Robles Montoya explicó que el Gobierno de la República ha dado prioridad al combate del crimen organizado, con una estrategia que cada día deja más muertos y víctimas inocentes; y hay un descuido total a las estrategias de prevención del delito como son la generación de empleo y el mejoramiento de la economía nacional.
“La emergencia debe atenderse con prontitud y sin regateos; la prevención con diligencia y constancia”, precisó el senador por Oaxaca, Benjamín Robles Montoya, al hacer un llamado a todas las instancias oficiales y civiles para que cumplan con la responsabilidad de construir la paz necesaria y el bienestar indispensable para todos.
Refirió que el país arrastra ya más de una década en emergencia en términos de seguridad pública y combate al crimen organizado, pero que en cualquier caso lleva muchos más años en emergencia social, en donde podrían considerarse los delitos del fuero común, que de ninguna manera se trata de justificar la comisión de este tipo de ilícitos.
Señaló que la ciudadanía y mucho más la autoridad no debe perder la sensibilidad ante la grave crisis social y humanitaria que se vive en numerosas entidades y comunidades de México, pues la pobreza no debe ser considerada “una normalidad o la regla, sino en todo caso una desafortunada excepción”.
En México, acotó, el problema es que la inseguridad y la delincuencia se quieren combatir con balas, cuando en realidad lo que procede hacer es crear empleos, condiciones de prosperidad y mucha educación.
“Así que el llamado es que las emergencias en seguridad nacional, donde quiera que se presenten y combatan, no distraigan de la verdadera solución: prevenir, prevenir y prevenir. Los pueblos prósperos son los que dirigen sus esfuerzos a atacar las causas de los problemas y a adelantarse a las complicaciones económicas de sus habitantes”, explicó Robles.
En ese sentido, dijo que el crimen se combate creando bienestar, esa es la clave, si los administradores del país no lo comprenden, entonces seguiremos gastando recursos millonarios apagando fuegos y no combatiendo el origen de los mismos.