Reyes Magos, entre plástico y juguetes bélicos

OAXACA, Oax. 5 de enero de 2015.-“¡Hay de a 10! ¡Lleve de a 10! ¡No gaste más, por sólo 10 pesos un juguete!”. Los gritos son incesantes en la avenida Central, cerca del Mercado de Abasto de la ciudad de Oaxaca.

Al caer la tarde, cientos de reyes se dan cita en la juguetería al aire libre más grande de la ciudad de Oaxaca, cubierta con carpas, para cumplir la ilusión de niñas y niños.

Pero esa ilusión es muy barata o demasiado cara. Hay artículos de plástico a un precio generalizado de 10 pesos, incluso calcetines. Pero hay metralletas, bicicletas o muñecas de moda que están entre 500 y mil pesos.

O las bicicletas y triciclos, que van desde los 600 a más de mil pesos.

“No sé cómo le vamos a hacer; está muy caro todo”, dice un Rey Mago, de San Juanito.

“¡Ándele! ¡Anímese! Es la ‘Ada que vuela de verdad’, ¡con control remoto!”, le ofrece animada vendedora, “por tan solo 350 pesos”, mientras saca la muñeca, de no más de 20 centímetros, en su caja con adornos. El hombre se rasca la cabeza; da vueltas y sigue buscando.

Pero no tiene muchas opciones. Recorre 500 metros de ida e igual de vuelta, donde sólo ve “baratijas” de 10 pesos; o las opciones tradicionales, juegos de té, de peltre o aluminio; muñecas sencillas de 50 o 100 pesos, pelotas de plástico de 35 pesos, hasta artículos más caros.

Abundan las pistolas o metralletas. Una con tableteo y luces de colores, por 130 pesos, pero es la más sencilla; las hay más modernas, de 150 y 180, o hasta 300 pesos.

“Mire jefe, aquí está su patín del diablo, con música y luces de colores; es de acero; ¡pruebe!”, lo intenta convencer otro vendedor, que muestra la manera de desarmar el aparato. “Ándele, cuesta 390, pero si se anima, ya, ya, se la dejo en 350, pero de una vez… bueno, ya de plano, 300”, ofrece el mercader.

La avenida Central, cerca del Periférico, por el lado oeste de la ciudad de Oaxaca, es un bullicio que aumenta a medida que avanza la noche, la víspera de la llegada de los Reyes Magos.

El caos de vehículos, taxis y autobuses urbanos y semiurbanos, es terrible; muchos se estacionaron en el camellón, casi sobre los antiguos rieles del ferrocarril.

Los vendedores de globos, por montones, invaden la calle; a 15 pesos cada uno, incluye su cartita a los Reyes Magos.

Hay de todo, hasta mascotas. Unos 2 vendedores de cachorros de una raza que dice es “Pastor italiano”, a tan solo 800 pesos. Amontonados, en una pequeña caja, los cachorros se sienten asfixiar anta tantas manos y brazos que los arrebatan.

Transcurren 2 horas de la noche del lunes; el Rey Mago no atina qué comprar, sólo lleva en el bolsillo 300 pesos…