
Desaparición Forzada
Oaxaca, Oax., 11 de agosto del 2011(Quadratín).- Los signos de estancamiento de la economía norteamericana deben poner en guardia a todos los mexicanos, sobre todo a quienes vivimos en los estados más vulnerables de la república. Los gobiernos de las entidades y el propio gobierno federal harán lo suyo que, como pinta el panorama, no será mucho.
En efecto, la deuda pública ahoga a las administraciones de los estados y la centralización en el manejo y la asignación de los recursos federales, agrava su situación. Lejos de aliviar las angustias estatales, el gobierno federal plantea limitar su capacidad de endeudamiento; pero no relaja la disciplina centralista con que administra lo programable de la recaudación fiscal y los ingresos extraordinarios que obtiene.
El en el caso de Oaxaca, cualquier medida federal de disciplina fiscal que se exprese en recortes presupuestales, planteará un impacto social de muy amplio alcance. En educación, la inercia con la que se presta el servicio público conlleva tendencias que una restricción presupuestal podría agravar muy seriamente.
El rezago educativo no logró disminuir durante el 2010. Las cifras que dio a conocer el INEGI, desmienten cualquier afirmación de que el analfabetismo se combatió con seriedad en Oaxaca durante los últimos 10 años. El censo del 2010 reportó 421,810 analfabetas de quince años o más, lo que significa un porcentaje de analfabetismo promedio del 16.27%.
Tanto el analfabetismo, como la población sin educación básica completa, derivan de dos causas principales: la ineficacia del sistema educativo para retener a su matrícula y la matriz pluricultural de Oaxaca.Todos esto en el contexto de un sistema educativo de baja calidad y muy alto costo.
En cuanto a lo primero, en Oaxaca entre el 50 y el 46% de los alumnos que se inscriben en primero de primaria no terminan la educación secundaria o porque desertan o porque reprueban. La existencia de un alto porcentaje de escuelas multigrado (más del 50% en educación primaria en sus diferentes modalidades) favorece la baja retención , pero también la deficiente infraestructura y equipamiento que tienen las escuelas, que para subsanarse en lo elemental, requiere de al menos 5 mil millones de pesos.
En un estudio reciente, Javier Sánchez Pereyra documenta la falta de articulación entre el servicio público en educación básica y el tipo de demanda que conforman las poblaciones indígenas en el estado. La desigual competencia entre dos tipos distintos de capital cultural, no puede más que repercutir en el fracaso de los escolares de origen étnico, sobre todo si estos no cuentan ni con los apoyos necesarios, ni con los insumos que garanticen la calidad del servicio.
El ejercicio real total del IEEPO en el 2010, fue de cerca de 17 mil millones de pesos, que aunque se dice que beneficia a un millón 300 mil alumnos, lo cierto es que como moneda constante y sonante, está destinado al pago de salarios a los trabajadores de la educación en un 97%. Lo anterior significa que si dividimos el total de lo ejercido por el Instituto, entre los 70 mil trabajadores de la educación, elingreso per cápita sería de 242, 857 pesos. El presupuesto de este año que autorizó el congreso del estado para el gobierno, fue de 42,050 millones de pesos. Si esto se divide entre los 3.8 millones de oaxaqueños, el ingreso per cápita sería de 11,065 pesos. Esta tremenda desigualdad en el destino del gasto público, lo identificó el Banco Mundial, en un estudio sobre los estados del Sur de México, que incluía a Oaxaca.
Para abundar un poco más en los altos costos del servicio de educación pública en el estado: 729.42 millones de pesos se erogan por plazas sin respaldo presupuestal y más del 60% del déficit de más de 4 mil millones de pesos que tiene el IEEPO, provienen de los bonos que se les pagan a los maestros. Por eso llama a compasión las declaraciones del actual director general del Instituto, Bernardo Vásquez Colmenares, cuando dice que hay fuga de 70 millones de pesos porque el anterior director le pagaba a sus asesores y que él no tiene ya a ese cuerpo de especialistas en su nómina. Se nota. Pero hay que aclarar que fue Abel Trejo quien canceló la oficina de asesores del IEEPO: Bernardo Vásquez sólo le dio continuidad a los despidos.
Pero si el actual director cree que lo que declara constituye un diagnóstico de la situación del sector que le toca administrar, está ciertamente equivocado.
Sin duda la desviación de recursos es un problema serio en el IEEPO, lo que el director general no dice, es que la mayor fuga está en el sobre giro de horas en las escuelas secundarias y en algunas modalidades de primaria. Hay algunas escuelas secundarias que tienen hasta 2000 horas de más. ¿Por qué no se sabe todo esto?
Porque las auditorias no se hacen a las escuelas y a los departamentos que maneja el sindicato, sino al minúsculo 3% del gasto total que ejercen las oficinas centrales del IEEPO.
Con la crisis que viene, la ineficiencia de la administración del IEEPO y la falta de planteamientos y soluciones a los problemas de la educación en el estado, no se puede augurar más que un miserable escenario para la educación en Oaxaca.