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CUERNAVACA, Mor., 8 de febrero de 2015.- Comerciantes establecidos y ambulantes se enfrentaron la tarde de este sábado contra policías del Mando Único para tratar de impedir el inicio de las obras de remodelación en el Centro Histórico de Cuernavaca.
Los inconformes fueron obligados a retirarse mediante el uso de gas lacrimógeno y enseguida entraron los trascabos para retirar el asfalto.
Los manifestantes bloquearon desde la tarde del viernes la calle Vicente Guerrero en protesta por el proyecto de remodelación que, aseguran, afectará sus ingresos.
Días anteriores, un grupo de aproximadamente 80 comerciantes cerró la calle Vicente Guerrero a fin de impedir que el Gobierno comience las obras, ya que “primero queremos saber dónde nos reubicarán”, expresaron y advirtieron que si no les resolvían su petición, continuarían con el bloqueo y la venta de sus artículos todos los días.
Aunque el gobierno de Graco Ramírez les prometió que habría mesas de diálogo y que serían reubicados mientras se llevan a cabo los trabajos, finalmente, fue la policía la que se encargó de desalojar las calles para que la maquinaria pesada comenzara a trabajar.
Hasta el momento, no se han reportado heridos graves, sólo algunos comerciantes con heridas leves y muchas personas, incluyendo reporteros, que resultaron afectados por los gases lacrimógenos.
El Gobierno del Estado de Morelos, emitió un comunicado al respecto, asegurando que quienes se enfrentaron con los granaderos son personas ajenas a los comerciantes.
El comunicado oficial informó que del ataque, cuatro policías resultaron lesionados, mientras que 17 personas fueron detenidas, mismas que fueron declarados en la Fiscalía General del Estado (FGE): «corresponderá a la FGE deslindar las responsabilidades de los detenidos, y aclarar a qué intereses obedecen en los casos que se encuentren elementos para vincularlos a proceso por los delitos que resulten».
Asimismo, un vehículo de la Secretaría de Obras Públicas de la marca Nissan, sobre la calle de Arteaga, y oficinas de Casa Morelos sufrieron daños.
El gobierno añadió que «de ninguna manera va a tolerar que se viole la ley con el subterfugio de la protesta».