
Bloquean vecinos de la Gómez Sandoval por obra inconclusa
Oaxaca, Oax, 13 de junio del 2011 (Quadratín).- Es un honor para mí presentar esta obra, a cargo de dos distinguidos juristas oaxaqueños, que ya han dejado registro de su extraordinario pensamiento en otras obras de su creación, dijo el presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE), Alfredo Lagunas Rivera, al dar la bienvenida a la presentación del libro El derecho y la justicia en las elecciones de Oaxaca, de los autores Manuel González Oropeza y Francisco Martínez Sánchez, que tuvo lugar este viernes en el auditorio del Centro Cultural Santo Domingo.
Acompañado de María del Carmen Alanís Figueroa, presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF); el magistrado del TEPJF, Constancio Carrasco Daza y la presidenta del Tribunal Estatal Electoral del Poder Judicial de Oaxaca, Ana Mireya Santos López, entre otros, Alfredo Lagunas manifestó su admiración por este valioso binomio jurídico formado por los autores, de quienes dijo también fueron participes en su formación académica.
Por su parte, la presidenta del TEPJF, al comentar el libro, señaló que éste constituye un gran reto, al conjugar la ciencia del derecho y la impartición de justicia, con el conocimiento de la cosmovisión de los pueblos indígenas.
Agregó que el objetivo de los autores es fomentar la cultura de la legalidad hacía el absoluto respeto a los derechos humanos fundamentales y los Usos y Costumbres en las comunidades indígenas, pero para que esto suceda es necesario abatir la pobreza e impulsar el desarrollo cultural de esos pueblos.
Mencionó también que el libro trata con responsabilidad el tema de los derechos políticos de las mujeres en los pueblos originarios, a través de datos estadísticos importantes que dan cuenta de su escasa participación en el sistema de cargos.
En tanto Constancio Carrasco Daza, al tomar la palabra resaltó el decreto de promulgación de la reforma constitucional en materia de derechos humanos, que de manera coincidente fue firmado ese mismo día por el presidente Felipe Calderón. Dijo que mediante esta reforma no existirá más jerarquización entre la Constitución federal y los tratados internacionales, por lo que si un ciudadano no encuentra protección a sus derechos fundamentales en la primera, pero si en los segundos, entonces los instrumentos de justicia serán los tratados internacionales.
En este sentido, abundó que Manuel González Oropeza y Francisco Martínez Sánchez son unos adelantados a esta reforma, ya que los coautores manifiestan en su nuevo libro que todos los tratados internacionales que reconocen la libre autodeterminación de las comunidades indígenas y que no contradicen a la Constitución pudieran ser empleados para protección y beneficio de las mismas.
Finalmente, Francisco Martínez Sánchez, uno de los autores del texto, aseguró que la justicia electoral en materia indígena solamente es posible conociendo y respetando las leyes de la democracia que emanan del seno de las comunidades originarias. Dijo que el artículo 20 constitucional reconoce el derecho de los pueblos indígenas a tener su propio derecho interno; un derecho que es diferente al positivismo jurídico, pero que es complementado por el mismo.
Por ello, destacó, el positivismo jurídico debe ser ético para fortalecer la paz y la concordia entre los pueblos indígenas.