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Bloquean vecinos de la Gómez Sandoval por obra inconclusa
Oaxaca, Oax. 16 de junio de 2013 (Quadratín).- Dedicaba el cien por ciento de su tiempo a la profesión que más amaba: ser policía. Tenía un amplio futuro por delante, pues en apenas una década ya había escalado varios niveles de mando en su corporación.
En los primeros minutos del sábado 15 de junio, lo sorprendió la muerte, cuando al enfrentar con sus compañeros de la Policía Estatal a unos delincuentes, en la colonia Santa Elena de Santa Cruz Xoxocotlán, fue abatido.
Zenón Ruiz Martínez nació en Nejapa de Madero, Yautepec, el 23 de junio de 1977. Procuraba de sus padres José Ruiz y Carmela Martínez, quienes todos los días rezaban por él. Su pareja, Teresa, sufría hora tras horas el peligro que enfrentaba; pero se alegraba también por el orgullo de tener a un policía a su lado.
El uniformado estudió la primaria y la secundaria en su pueblo natal, y ya siendo policía, se propuso hacer el bachillerato abierto, y lo logró.
Aunque desde chico tenía la espina por convertirse en un guardián de la sociedad, se animó a integrarse a la Policía Estatal el 16 de enero del año 2002, como Policía A de la Segunda Compañía del Sexto Batallón. Pero en ese primer intento no estuvo muy convencido; siete meses después se dio de baja.
Volvió a integrarse dos años después, el 1 de septiembre de 2004 y de ahí su carrera fue ascendente.
A principios de enero de 2005 culminó de manera satisfactoria el Curso básico de formación inicial para Policía Preventivo y después el Curso básico de Grupos Especiales; al año siguiente obtuvo el nombramiento de Policía Tercero; otro año más y ya subió a Policía Segundo. Para el 2009 ya había tomado el curso de identificación vehicular; el 1 de mayo de fue designado Suboficial por ascenso, de la Tercera Compañía del Sexto Batallón. En 2010 tomó una capacitación de protección a funcionarios.
Este 2013 era el de su consagración. Del 18 de marzo al 31 de mayo se hizo cargo de la Subdirección Canina; el 1 de junio se reincorporó a la Dirección de Reacción y Alerta Inmediata de la Policía Estatal.
Entre sus acciones relevantes este año, había participado en la detención de tres presuntos asaltantes, en San Bartolo Coyotepec.
Tenía muchas ilusiones de seguir escalando posiciones, de seguir siendo cada día un mejor policía. El sábado, el sueño quedó truncado. Murió en el cumplimiento de su deber de velar por la seguridad de los oaxaqueños.
Foto: Serafín Sánchez